Más Información
Marianne Gonzaga; esta fue la última publicación de la influencer en Instagram antes de ser detenida
Macario, músico barrendero de CDMX, rompe en llanto tras escuchar su canción en la radio; video se viraliza
Roma. El reportero Francesco Cancellato, director del medio digital Fanpage y uno de los italianos espiados con malware vinculado a la empresa israelí Paragon, denunció que fue espiado "por ser periodista" y acusó de mentir al Gobierno de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni.
"¿Por qué el Gobierno italiano mintió sobre Paragon?", se pregunta Cancellato en Fanpage después de que anoche el Ejecutivo de la ultraderechista Meloni negase su implicación en el escándalo de ciberespionaje vía WhatsApp que afectó a unas 90 personas en varios países del mundo, siete de ellas en Italia.
Según Cancellato, si el Gobierno no espió a ningún periodista o activista, "¿por qué Paragon rompió el contrato con Italia por violar las reglas de uso inmediatamente después de que estalló el escándalo?", después de que así lo informaran el periódico británico 'The Guardian' y el israelí 'Haaretz'.
El periodista explica que quién espió su móvil "lo hizo porque buscaba documentos o pistas" sobre las próximas investigaciones de Fanpage, que en 2024 se infiltró en las juventudes del partido Hermanos de Italia de Meloni y reveló una atmósfera de comentarios racistas y antisemitas o saludos fascistas entre jóvenes de la organización.
"¿Quién ordenó esta actividad de espionaje? Esta es la pregunta más importante", asegura el reportero.
Cancellato resalta que los sistemas de Paragon solo se venden a gobiernos y agencias de seguridad, asegura que hoy hay 37 Ejecutivos -todos socios de Estados Unidos- que lo tienen y pide al Gobierno de Meloni que aclare si Italia está entre ellos "para disipar cualquier duda".
También hoy la oposición pidió explicaciones urgentes al Gobierno en el Parlamento.
Entre las 90 personas espiadas también figura el italiano Luca Casarini, fundador de la ONG italiana Mediterranea Saving Humans, dedicada a rescatar migrantes en el Mediterráneo central y muy crítica con las políticas de la coalición de Meloni en este ámbito.
"El equipo jurídico de Mediterranea Saving Humans está trabajando para presentar una denuncia sobre este caso. Pediremos a los investigadores que averigüen qué ha sucedido y quién ha ordenado el espionaje de mi teléfono a través del software Pargon", explicó este jueves Casarini a los medios.
El activista libio Husam El Gomati, residente en Suecia y que ha denunciado la cooperación de Italia y Libia para frenar los flujos migratorios en el Mediterráneo, también aseguró haber sido espiado.
El Gobierno italiano confirmó anoche que 7 usuarios de teléfonos del país fueron blanco del software de Paragon, llamado Graphite, y pidió a la Agencia Nacional de Ciberseguridad que lo investigue.
ss/mcc