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Desde el ascenso de reportes sobre avistamientos de "platillos voladores" en México y en el mundo a finales de la década de 1940, no pasó mucho tiempo para que el tema fuera abordado en la pantalla grande.
La vida en otros planetas ha sido un tema muy popular en el cine, desde su primera aparición en la cinta de cine mudo “Viaje a la Luna” del director francés Georges Méliès, los extraterrestres y seres extraños de otros mundos han invadido las salas de cine y el cine mexicano no fue la excepción.
Es así como nos remontamos al año de 1946 con la película titulada “El moderno Barba Azul” dirigida por Jaime Salvador y protagonizada por Buster Keaton. Esta película es considerada como la primera de ciencia ficción mexicana que aborda extraterrestres y naves espaciales posterior a la Segunda Guerra Mundial.
La cinta relata la historia de un soldado de la segunda Guerra Mundial que llega a México con la idea errónea de haber llegado a Japón. Con esa creencia se entrega a las autoridades y durante su estancia en prisión se encuentra con un delincuente interpretado por Ángel Garasa. La trama lleva a ambos actores a aceptar ser parte de un experimento que consistía en viajar a la Luna a cambio de indultarlos por sus crímenes.
El viaje resulta un desastre y la nave se estrella en un pequeño poblado desértico haciendo creer a nuestros protagonistas que habían llegado a la Luna, mientras tanto los pobladores sorprendidos por la nave y los atuendos “espaciales” de los tripulantes creen que son habitantes de la Luna. Dentro de este juego de mal entendidos la película se desenvuelve como una comedia que hace referencia a la susceptibilidad de las personas para creer en seres del espacio.
Su trama, aunque aborda la temática espacial, está más ligada a la vieja concepción de los extraterrestres que se tenían en las antiguas películas mudas como la antes mencionada dirigida por Méliès. Esto puede explicarse debido a que su estreno fue unos meses antes del incidente del Caso Roswell.
Una de las muestras más relacionadas con los avistamientos OVNI que se habían reportado a finales de la década de 1940 es La película dirigida por Julián Soler “Platillos voladores”, estrenada en 1955, al igual que “El moderno Barba Azul”, se trata de una comedia donde el tema principal es la ciencia ficción y los extraterrestres.
En la trama de la película un punto que destaca es que durante los primeros minutos de la cinta se usa como recurso planas de periódicos donde reportan la inminente invasión de extraterrestres en la ciudad y se observa la transmisión de un programa de televisión que aborda el tema de los OVNIS y seres de otras galaxias.
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El caso de esta película, permite apreciar que, al menos para 1955, el inicio de la carrera espacial que culminaría en 1969 se tenía presente en México. A pesar del contexto que ofrece la cinta, su trama se mantiene dentro del género de la comedia enfocada en la clásica sátira mexicana de la época.
Los protagonistas, Adalberto Martinez 'Resortes' y Evangelina Elizondo interpretaron a los personajes de Saturnina y Marciano, van a una fiesta de disfraces utilizando un auto modificado construido por Marciano. Convenientemente, sus disfraces son trajes brillantes similares a los de los astronautas.
Regresando de la fiesta el auto modificado empieza a flotar causando que Marciano pierda el control y se estrellan a la orilla de una carretera. El choque es tan aparatoso que los testigos asumen, sin dudar que se trata de una nave espacial y que los tripulantes son de otro planeta.
Finalmente, la trama se resume en la respuesta que la gente tiene ante la posibilidad de un contacto alienígena; conforme avanza la película los protagonistas se ven envueltos en una red de mentiras de la que escapan con ayuda de un científico que descubre su verdadera identidad.
Platillos Voladores (1955)
El cine de ciencia ficción con temática espacial tuvo a partir de los años 40 una producción que alcanzó su punto máximo en la década de 1960, en su mayoría se trataba de comedias e intervenciones hilarantes de extraterrestres monstruosos como es el caso de “La nave de los monstruos”(1960), encuentros accidentales con sociedades de otros planetas como “El conquistador de la luna” (1960) ambas películas dirigidas por Rogelio A. González, mujeres de otro planeta como en la película “El planeta de las mujeres invasoras”(1966) y de luchadores contra marcianos como la película de “El Santo contra la invasión de los marcianos”(1967).
Posteriormente, durante la década de 1970 la temática espacial había sido ya muy explotada por los directores de cine mexicano y le dieron un cierre para enfocarse en otras temáticas.
- Fuentes:
- Laboratorios nacionales: un panorama del cine mexicano de ciencia ficción en el siglo XX. Rafael Villegas. El ojo que piensa, revista de cine iberoaméricano.