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Todos los alimentos que consumimos a diaria pueden ser de los más comunes aunque existen oportunidades en que las personas se dan la oportunidad de probar cosas nuevas. Por lo general, cuando uno emprende algún viaje a una cultura desconocida es cuando busca tomar contacto con su historia, cultura, tradiciones y comidas típicas.
Más allá de que de un país a otro podemos hallar alimentos que nunca hemos consumido, muchos de ellos podrían denominarse como comunes. Esto quiere decir que existen especies que se han difundido con el paso de los años y han traspasado los límites internacionales. Estas forman parte hoy de la gastronomía internacional, aunque tal vez desconozcamos de la historia que las acompaña.
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Una especia con historia
En esta oportunidad, pondremos sobre la mesa de debate una especia que en la época helena era consumida porque otorgaba coraje y fuerza a las personas. Se trata del tomillo, un pequeño arbusto que aporta hierro, timol, aminoácidos y aceites esenciales como el carvacrol y el cineol que, según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (España), les otorgan a esta especia propiedades beneficiosas para la salud.
Sus expertos afirman que el tomillo ayuda a regular la función intestinal, tiene propiedades antisépticas, alivia los síntomas de la gripe, anginas, bronquitis y faringitis. También es diurético, antirreumático y colabora en la recuperación de los músculos tras una actividad física intensa, por lo que incluir esta especia entre nuestros alimentos resulta sumamente beneficioso.
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Más allá de lo referido estrictamente con el tomillo, su valor nutricional e impacto en la salud, resulta interesante saber algo sobre su historia. Es por eso que recurrimos al libro “El Sabor de las Especias. Todo lo que necesitas para saber transformar tus platos”, de Juliana Perpén, en el que además de ahondar en la parte culinaria de las especias, da cuenta sobre la historia que las acompaña.
En este marco, Perpén afirma que el tomillo nació de las lágrimas de Helena de Troya y que se creía que su consumo otorgaba coraje y fuerza a las personas. Lo señalado, hace referencia a que este alimento atesora parte de su historia en la mitología griega, con nacimiento en la hija de Zeus, una joven que muchos héroes pretendían por su gran belleza.
