Si algo nos ha enseñado la historia reciente de la tecnología, es que cuando las mujeres no estamos en la mesa de innovación, terminamos siendo solo usuarias —nunca diseñadoras del cambio. Y hoy, con el auge de tecnologías como blockchain, la Web3 y el metaverso, esa exclusión se está repitiendo.
Un informe de BCG y People of Crypto Lab reveló que solo el 13% de los equipos fundadores en el ecosistema Web3 tienen mujeres. Y aunque el discurso de estos nuevos mundos digitales promueve la descentralización, la equidad y la disrupción, en la práctica, están reproduciendo viejas brechas con nuevas interfaces.
¿Por qué? Porque para muchas mujeres, estas tecnologías siguen envueltas en un lenguaje técnico, críptico, excluyente. Y porque aún no hemos creado suficientes espacios seguros, accesibles y diversos donde las mujeres puedan aprender, experimentar y liderar en estos entornos.
No se trata de “incluir” a las mujeres como si fuéramos una cuota. Se trata de garantizar que quienes construyen el futuro digital representen la pluralidad del mundo real.
Imaginar una Web3 sin mujeres es repetir el error de construir plataformas que no entienden nuestras necesidades, que no reflejan nuestra experiencia, ni abren oportunidades equitativas. Por eso necesitamos pasar del consumo a la creación: ser las programadoras de contratos inteligentes, las diseñadoras de mundos virtuales, las líderes de comunidades descentralizadas.
Desde Unlocked AI creemos que la verdadera innovación nace cuando combinamos tecnología con propósito. Y ese propósito solo es posible si las mujeres también escribimos el código del mañana.
No podemos permitir que la Web3 sea otro espacio al que llegamos tarde. El momento de ocuparlo es ahora.
Ser una mujer en la Web3 significa más que usar nuevas tecnologías: es ocupar un espacio de creación y liderazgo en un entorno que está redefiniendo cómo nos conectamos, comerciamos y construimos comunidad en internet. La Web3 no es solo criptomonedas o NFT; es un ecosistema donde podemos programar contratos inteligentes, diseñar experiencias inmersivas en el metaverso, liderar comunidades descentralizadas y emprender sin intermediarios. Para nosotras, implica transformar la idea de ser simples usuarias en convertirnos en arquitectas del futuro digital, asegurando que esta nueva era no se construya sin nuestra voz, talento y visión.
CEO de Unlocked AI