Las autoridades federales han dejado en el olvido a las niñas, niños y adolescentes de nuestro país. Por ello, resulta imprescindible que el Estado Mexicano, en particular el gobierno federal, asuma compromisos que permitan solventar las carencias y garantizar los derechos de la infancia, a lo que está obligado por mandato constitucional.
El presupuesto de los programas federales destinados al desarrollo integral de la infancia en nuestro país ha disminuido de manera drástica, particularmente a partir de la llegada al poder del Presidente López Obrador.
No podemos dejar de mencionar la falta de medicamentos pediátrico oncológicos y de vacunas para el esquema básico, sin olvidar la tardía aplicación de vacunas anti COVID para las y los menores de edad y, ahora, la desaparición, en los hechos, de la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes.
La eliminación del Programa de Estancias Infantiles para Madres y Padres Trabajadores y del Programa de Escuelas de Tiempo Completo reflejan no solo el desconocimiento de la alarmante situación de la educación en nuestro país, sino que constituyen una abierta violación al principio de progresividad de los derechos humanos y a los derechos a la educación y a una alimentación sana de las niñas y niños mexicanos. Por todo ello, desde Imaginemos México, equipo de trabajo que elaborará el Programa de Gobierno de la Coalición Fuerza y Corazón por México, abriremos el diálogo y la reflexión para construir una agenda que se pueda convertir en política de Estado para garantizar los derechos de niñas, niños y adolescentes. En estas mesas de discusión, que serán encabezadas por la Senadora Josefina Vázquez Mota, y quien esto escribe, realizaremos foros, encuentros y debates sobre diversos tópicos, entre ellos reconocer a niñas niños y adolescentes como sujetos de derechos. Garantizar que las instituciones actúen bajo el principio constitucional del interés superior de la infancia y con perspectiva de niñez.
Invertir los recursos necesarios en la garantía de derechos de niñas, niños y adolescentes, impulsando la progresividad presupuestal. Erradicar el trabajo infantil y asegurar la atención prioritaria a la infancia en situación de pobreza, con alguna discapacidad o perteneciente a alguna comunidad indígena o afromexicana.
Priorizar los recursos necesarios para los organismos de protección de la infancia como la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes. Garantizar el acceso a servicios de salud, agua potable, atención médica, medicamentos y vacunas, seguridad alimentaria e infraestructura médica, incluyendo la salud mental y el combate a la obesidad. Combatir el embarazo adolescente
Asegurar el derecho a la educación de niñas, niños y adolescentes. Impulsar las Escuelas de Tiempo Completo, así como una educación de calidad e incluyente de todas y todos en particular de niñas, niños y adolescentes con discapacidad. Combatir la deserción escolar, que aumentó durante la pandemia, y promover el acceso a Internet gratuito en escuelas y plazas públicas.
Prevenir, sancionar y erradicar cualquier tipo de violencia y aplicar CERO tolerancia a delitos sexuales en contra de niñas, niños y adolescentes.
La infancia en nuestro país ha vivido momentos difíciles, particularmente derivado de la situación de violencia que ha dejado, en los últimos años, miles de niñas y niños en situación de orfandad, los que se suman a las y los que perdieron sus familias a partir del mal manejo del Gobierno Federal de la pandemia, por lo que debemos reforzar las acciones, programas y compromisos a través de una agenda a favor de la infancia y la adolescencia mexicana.
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