La Revolución Mexicana elevó a la gubernatura del estado de Chihuahua a personalidades que no sólo se batieron en el campo de batalla, sino que también pudieron ejercer su poder atrás de un escritorio como Francisco Villa, quien asumió el poder estatal el 8 de diciembre de 1913.
El llamado “León del Norte” -apodo que le otorgaron los militares norteamericanos de la expedición punitiva del general Pershing a Villa en 1916- estaba viviendo uno de sus mejores momentos.
Lee también Villa atacó Columbus porque le robaron
Tras el triunfo en Ciudad Juárez y Tierra Blanca, Villa se propuso sacar de Chihuahua al último reducto organizado del ejército de Huerta, antes de que arribara el contingente villista.
Las fuerzas del Gobierno, a cargo del general Mercado, evacuaron la plaza de Chihuahua la primera semana de diciembre de 1913, dando lugar a que las fuerzas rebeldes ocuparan la capital.
Mercado declaró que él no podría mantener las garantías a las familias acomodadas de la capital, por lo que Los Terrazas, Falomir y Touche se vieron obligados a dejar a sus lujos para emprender la llamada Caravana de la Muerte, como se le llamó aquella jornada para llegar a Ojinaga, y previo a su partida nombró gobernador Interino a Federico Moye.
Lee también El último día que Villa condujo su Dodge
Moye se encargó de hacer el acto protocolario de entrega de poder de la plaza al Centauro del Norte, quien debía asegurarse de retardar la rendición en tanto Mercado, sus tropas y los civiles que lo acompañaban estuvieran ya lejos de Chihuahua.
Han sido varios los biógrafos, historiadores o guía de turistas, en lo relativo a cómo Villa tomó la gubernatura de Chihuahua y afirman que el centauro se impuso bajo amenaza de fusilar a quien lo impidiera.
Otros se atreven a afirmar que Villa mató al gobernador en turno para poder tomar el control estatal. Sin embargo, para quienes escriben este texto, esas versiones no se acercan ni a la mentira, pues Villa fue gobernador bajo los estatutos del Plan de Guadalupe.
En el documento del nombramiento de Villa como gobernador aparecen las firmas de los generales Maclovio Herrera, José Rodríguez, Manuel Chao y Francisco Villa, según se lee en el libro La Inconmensurable Obra Renovadora del Gobernador Francisco Villa.
Lee también El diputado que confesó ser el asesino de Pancho Villa
Así fue como Francisco Villa, quien apenas un par de años atrás había sido un forajido perseguido por la justicia, ese día lunes 8 de diciembre de 1913 se convirtió en la justicia al tomar protesta como gobernador, fue cuando se sentó en la silla.
La política internacional no estaba ajena a lo acontecido en Chihuahua, por lo que el 10 de diciembre el gobernador recibió un telegrama desde la Casa Blanca, en el que se instruía al cónsul americano a hacerle ver a Villa que un buen trato hacia los habitantes del estado “influiría… a que universalmente se despertaran sentimientos de respeto”.
Incluso, los amigos del general Luis Terrazas habían intercedido ante el gobierno norteamericano para que la familia de Villa y el mismo Centauro, fueran protegidos contra cualquier atentado.
Lee también La calle a la que Francisco Villa le devolvió el nombre
El cónsul representante de Washington que se entrevistó con Villa en el Palacio de Gobierno fue Marium Letchert y días después haría lo mismo el cónsul británico Calvert G. Scobell, cuyos restos reposan en el panteón de Dolores de Chihuahua, según consta en el libro Francisco Villa y La Revolución de Federico Cervantes.
En uno de sus primeros discursos como gobernador externó estas palabras por aquellos días de pobreza, hambre y desesperanza en el estado:
"Saludo a mis hermanos de raza. Sé que se están muriendo de hambre en su Patria, pero esto no debe durar mucho. Pido a todos ustedes que me ayuden. Desde hoy mismo he ordenado que se venda carne a diez centavos el kilo; he ordenado que se venda todo el maíz que está oculto por los comerciantes; he mandado que, desde esta tarde y por los turnos que sean necesarios, se abran las puertas de los almacenes de Chihuahua", según se lee en el libro LA MERA MERA, de Luz Corral de Villa.
Villa se distinguió de otros revolucionarios por su gran capacidad militar, recibiendo por ello el ascenso como líder estatal del movimiento maderista.
Lee también El Panteón de Dolores donde descansan ilustres chihuahuenses
Una de las primeras encomiendas de Villa como gobernador fue la creación de una comitiva para recuperar los restos del mártir revolucionario Abraham González Casavantes, quien había sido ultimado el 7 de marzo de 1913 -9 meses antes de que Villa asumiera el cargo como Gobernador- entre la estación de tren Horcasitas y Bachimba, Chihuahua.
Luego fue velado en la capilla Ardiente al interior del Palacio de Gobierno del Estado y trasladado al Panteón de la Regla.
De caudillo a gobernador
Villa tenía el gran reto de ser funcionario público, situación que no había experimentado antes.
La administración del estado atravesaba una economía complicada y orientada a la exportación, además de financiar un ejército capaz de derrocar a las fuerzas huertistas y atraer a los sectores de la población aliados a Orozco.
Lee también Luz Corral, la esposa revolucionaria que dedicó su vida al legado villista
Para lograr dotar de armas a la poderosa División del Norte, Villa encontró en la venta de ganado, productos agrícolas, pero especialmente en el algodón, el financiamiento, sin dejar de lado la humilde aportación que hicieron “voluntariamente” 200 soldados federales que se quedaron en la plaza, mismos que fueron desarmados y puestos en completa libertad dos días después en Ciudad Juárez.
Chihuahua no era un centro industrial, los ganaderos y agricultores ya no llegaban a la ciudad a vender sus productos, por lo que la población tuvo una paralización comercial y el hambre amenazaba a los habitantes de la capital al darse prioridad a la exportación extranjera.
Cuando terminó de escuchar a su secretario de gobernación, Silvestre Terrazas, y a su tesorero, Sebastián Vargas, el reporte de que, con todo y la estrategia de venta de ganado, algodón y productos agrícolas, no alcanzaba para las finanzas estatales, Villa dijo: “si no hay dinero, hay que emitirlo”.
La primera emisión del nuevo dinero emitido fue de dos millones de pesos, sin otra garantía que el nombre del gobernador, después fueron 10 millones más. El decreto para la creación del Banco de Chihuahua se firmó el 12 de diciembre de 1913 al interior del Palacio de Gobierno.
Lee también El instante en que Francisco Villa se sentó en la silla presidencial
Fue durante este tiempo que surgió la única moneda en el mundo que le ha deseado la muerte a un presidente. La pieza de un peso fue acuñada en Cuencamé, Durango, y tenía la leyenda “Muera Huerta”.
Se dice que el presidente Huerta contestó la ofensa mandando fusilar por decreto presidencial a cualquier persona que tuviera una moneda de esas.
No sólo Villa imprimió su dinero, otros jefes lo hicieron; lo que es cierto es que la moneda de Chihuahua fue la única que banqueros norteamericanos compraron con valor de 18 y 19 centavos por dólar porque Villa lo garantizaba; también los comerciantes en el Paso, Texas, lo respaldaron y empezó a circular como moneda de cambio a tal grado que hubo falsificaciones en los EU.
Otra medida del nuevo gobernador fue establecer el orden, por lo que lanzó avisos a la población: “Ninguna persona puede imponer préstamos forzosos por ninguna circunstancia, no está permitido sacar caballos, ni otros intereses de propiedades particulares. Sólo se podrán exigir con una orden por escrito del cuartel general y firmada”.
Lee también “La Güera” representó a Villa después de muerto y recibió destacados reconocimientos
En su decreto relativo a la Confiscación de Bienes emitido en diciembre de 1913, Villa ordenó “la intervención de la tierra y otras propiedades pertenecientes a la oligarquía chihuahuense y poderosos terratenientes encontrándose entre los más prominentes las familias: Terrazas, Creel y Falomir, se lee en el libro La Inconmensurable Obra Renovadora del Gobernador Francisco Villa del autor Rubén Beltrán Acosta, cronista de la Ciudad de Chihuahua.
Grandes cambios en muy poco tiempo
Aunque sólo fueron cuatro semanas las que el rebelde revolucionario ocupó el cargo de Gobernador Provisional, Chihuahua logró grandes cambios, la mayoría de carácter social:
Emitió 17 decretos los cuales transformaron la vida social, económica y política de toda la región, a sus soldados los puso a trabajar en la planta eléctrica, en el molino de trigo, en las oficinas de correos y teléfonos, se crearon 50 escuelas, se estableció la Ley seca para sus tropas y ordenó instalar la primera estación radiotelegráfica en el estado.
Las instalaciones se hicieron en el Palacio Municipal y las antenas se colocaron en las torres de catedral. Aquel hombre de tan sólo 36 años se ganó muy bien el título de Gobernador Militar Constitucionalista.
Lee también El fin de la persecución apache en Chihuahua
Durante el final de su mandato a inicios de 1914, el 7 de enero, el jefe Constitucionalista Venustiano Carranza realizó el nombramiento del general Manuel Chao como gobernador del estado, en sustitución de Francisco Villa.
Éste acató la orden del primer jefe, pero se dice que, en realidad, Villa seguía gobernando. Igualmente, se atribuye a Villa la famosa frase: “Chao es gobernador, pero en Chihuahua manda la División del Norte” del libro de Beltrán Acosta.
Un dato irónico es que la familia Terrazas terminó emparentada con la familia Falomir, Moye e increíblemente con la familia Madero.
No existe ninguna fotografía de Villa tomando posesión como gobernador y la imagen que historiadores y medios de comunicación han publicado como tal fue tomada en la CDMX en 1911, así lo avaló Luz Corral de Villa en el libro de La Mera Mera.
Al interior del Palacio de Gobierno de Chihuahua, dentro del Salón de Gobernadores, se encuentra la fotografía del caudillo revolucionario más famoso del mundo. El periodo en el que Villa gobernó también está registrado en el portal oficial del Gobierno del Estado de Chihuahua.
- Fuentes:
- Villa: El Gobernador Revolucionario de Chihuahua/Friedrich Katz, Segunda Edición 2003 Traducción al español Rubén Osorio
- Periódico LA PRENSA Semanario Popular Independiente/San Antonio Texas, jueves 11 de diciembre 1913 TOMO I. NUMERO 44 Portada
- La Inconmensurable Obra Renovadora del Gobernador Francisco Villa / Rubén Beltrán Acosta, Cronista de la Ciudad de Chihuahua
- Francisco Villa y la Revolución / Federico Cervantes
- LA MERA MERA Luz Corral de Villa/Alfonso Escárcega, septiembre 2012
- Instituto de Investigaciones Estéticas (IIE). Fotografía de: Federico Moye con varones en Guerrero, Chihuahua. Tomada en: México, Chihuahua, Guerrero, Imagen: Archivo Fotográfico Manuel Toussaint (AFMT), Vicente Cortés Sotelo (CVCS). En Portal de datos abiertos UNAM (en línea), México, Universidad Nacional Autónoma de México.
- Archivo Histórico de Chihuahua
- Portal oficial del Gobierno del Estado de Chihuahua