El Palacio Postal, o la Quinta Casa de Correos, como también se le conoce, ha siso puente indispensable en la comunicación de millones de mexicanos desde principios del siglo XIX, pero también testigo en la historia de la Ciudad de México. Inaugurado el 17 de febrero de 1907 por el presidente Porfirio Díaz, esta joya arquitectónica de estilo ecléctico fue diseñada por Amado Boari, quien diseñó también el Palacio de Bellas Artes, y construida por el ingeniero Gonzalo Garita. El Palacio Postal es punto de referencia de la correspondencia nacional e internacional en nuestro país y fue declarado monumento artístico, el 4 de mayo de 1987. Para quienes formamos parte de la familia postal nos sentimos muy orgullosos de tener esta joya como símbolo de nuestra actividad y por ello, amables lectores, y como un pequeño homenaje en su 118 aniversario, me permito compartirles esta breve crónica:

Los capitalinos gustamos de recorrer nuestra ciudad, alguna vez llamada “Ciudad de los Palacios”, por el viajero inglés Charles Latrobe, a mediados del siglo XIX. Y en verdad podemos admirar en cada calle, esquina o plazuela del Centro Histórico de esta gran urbe una amplia variedad de construcciones y legado arquitectónico colonial.

En la esquina del Eje Central Lázaro Cárdenas (anteriormente San Juan de Letrán) y la calle de Tacuba, se erige el Palacio Postal, o Quinta Casa de Correos. De pronto, descubro en la revista “Centro, Guía para Caminantes” (número 40, año V, mayo 2007) una fotografía espectacular en su portada que muestra la magnificencia de la fachada principal de este majestuoso edificio. Es de agradecer a su director Carlos Méndez D., así como a sus colaboradores, investigadores y redactores que se hayan dedicado a desarrollar temas de mucho interés para orientar a quienes se aventuran a recorrer las calles llenas de policromía del Centro Histórico capitalino.

En las páginas de esa revista destaca una crónica publicada el 18 de febrero de 1907 en el periódico El Imparcial, un día después de la inauguración oficial del Palacio Postal. Por su elocuencia y uso de un lenguaje elegante, reproduzco para ustedes amables lectores parte de la misma:

“El tan esperado acontecimiento llegó ayer, fue solemnemente inaugurada de Gran Casa de Correos que la levanta su blanca silueta reclamada en encajes cincelados, en el ángulo de las calles de Santa Isabel y San Andrés.

“El 14 de septiembre de 1902, el señor General Díaz colocó la primera piedra del importante edificio y ayer abrió los portones del servicio público.

“La capital cuenta con un monumento más del arte contemporáneo, digna mansión de uno de los organismos administrativos más útiles y benéficos.

“El aspecto del edificio es acicalado, flamante, bello, casi deslumbrante, denota un gran adelanto, como fruto del refinamiento de las artes, como la satisfacción de un ideal de progreso, erguirse imponente al magnífico edificio, al parecer orgulloso de sustentar nuestra tricolor enseña, que flota por primera vez en lo alto de su calado frontis”.

Hasta aquí, apreciable lector, esta pequeña retrospectiva a nuestro orgullo postal, con motivo del 118 aniversario de la Quinta Casa de Correos, que como apuntamos líneas arriba, ha acompañado la historia de México en sus etapas fundamentales: desde los painanis, mensajeros del Imperio Azteca, la Independencia, la Reforma y la Revolución Mexicana.

En otras colaboraciones aquí en El Universal, “Gran Diario de México”, seguiremos compartiendo para ustedes algunas crónicas interesantes de El Imparcial reproducidas por la revista “Centro, Guía para Caminantes”.

Hasta la próxima.

Únete a nuestro canal ¡EL UNIVERSAL ya está en Whatsapp!, desde tu dispositivo móvil entérate de las noticias más relevantes del día, artículos de opinión, entretenimiento, tendencias y más.

Google News

TEMAS RELACIONADOS