A los que les duró poco el gusto de presumir a la policía, nos cuentan, son el gobernador de Zacatecas, David Monreal Ávila (Morena), y su secretario de Seguridad Pública, el general Arturo Medina Mayoral, pues el alcalde del municipio de Tabasco, Carlos Fabián Vera Loera (PAN), denunció una presunta ejecución extrajudicial y detención ilegal de dos jóvenes durante un operativo del grupo de élite Fuerza de Reacción Inmediata de Zacatecas (FRIZ). Por lo pronto, nos dicen que el asunto escaló a una investigación en la fiscalía local y a una queja de oficio en la Comisión Estatal de Derechos Humanos, lo que no ha dejado muy bien a don David, quien se sentía “ejemplo nacional”. ¡Auch!
PAN, cerca de alcalde potosino
El que andaba “entre melón y sandía” en San Luis Potosí, nos platican, es el alcalde de la capital, el aún priista Enrique Galindo Ceballos, pues hace apenas unos días reveló que había recibido invitaciones de Morena y el PVEM para sumarse a estos partidos y estaba analizando sus propuestas. Sin embargo, nos señalan que no se quedará en ninguno de estos dos partidos, pues el que se enfila como “ganón” será el PAN, el cual le ofreció que sea su abanderado a la gubernatura en 2027, además de que la esposa de don Enrique, Bertha Estela Arriaga (PAN) asumió un escaño tras la licencia de la senadora Verónica Rodríguez Hernández (PAN). ¡Más claro, ni el agua!
Luisa María Alcalde silencia porras
La que llegó “a dar un golpe en la mesa” en Chihuahua, nos comparten, fue la dirigente nacional de Morena, Luisa María Alcalde Luján, pues durante su última visita les dejó claro a varios “suspirantes” a la gubernatura que aún no es tiempo. Durante un evento, nos relatan que parecía “competencia de porristas”, pues cada líder morenista recibió su grito de “gobernador” para dejar ver “las huestes”, como ocurrió con el alcalde de Ciudad Juárez, Cruz Pérez Cuéllar, por lo que doña Luisa María, en un tono no muy cordial, afirmó: “Ya veremos más adelante, compañeros, quién será el candidato o candidata. Ahora toca apoyar a Claudia Sheinbaum”, lo que silenció las porras. ¡Zas!