El futuro del mundo puede escribirse aquí. No creo que exagero. De lo que ocurra en este lugar, depende el resultado de la elección presidencial en Estados Unidos. Y esa elección tendrá un impacto en el planeta entero.
Es la frontera entre México y Estados Unidos. Y son los tiempos en que la inmigración ha desplazado a la economía como el tema central en el choque entre demócratas y republicanos.
De acuerdo con una encuesta de Gallup, por primera vez en cinco años, la inmigración es el asunto más importante para los votantes estadounideneses y esto representa una enorme presión para el presidente Biden.
Desde que él llegó a la Casa Blanca, el aumento en el número de personas que cruzan y piden asilo ha sido un reto para su gobierno. Hemos visto un aumento constante. En el último año fiscal, las autoridades reportaron un total de 2.5 millones de encuentros con migrantes. Más que los 2.4 millones de 2022 y los 1.7 millones de 2021. Estos “encuentros” como les llama la Patrulla Fronteriza, incluyen migrantes que piden asilo en un puerto de entrada, y también migrantes que cruzan de forma irregular.
El problema para Biden es que esta crisis ya no solo se siente en la frontera, sino en otros estado del país, como Nueva York, California, Colorado, Illinois, donde los albergues y los recursos para recibir a estos migrantes están al límite.
En una contienda hacia la Casa Blanca en la que todo apunta a que se enfrentará con el expresidente Trump, esto es un problema grave para los demócratas. Ya en 2016, Trump centró su campaña precisamente en la inmigración.
Recientemente Trump culpó a Biden por lo que llama una “invasión que destruye nuestro país y mata a nuestros ciudadanos”. Se refería concretamente al asesinato de Laken Riley, una estudiante de la Universidad de Georgia, a manos de un hombre venezolano que entró a Estados Unidos ilegalmente. Y es verdad, hay casos que se deben señalar y no tienen justificación. Pero si uno ve los datos, la evidencia apunta a que el número de delitos no aumentan con la inmigración. Más de 170 mil nuevos asolicitantes de asilo han llegado a Nueva York en los últimos meses, pero según la policía de ese lugar, los índices de criminalidad no han aumentado.
Trump también ha dicho que “cuando sea Presidente, cerrará la frontera, detendrá a los migrantes y en el primer día comenzará la mayor deportación en la historia”.
Y eso significa que este es un asunto que no solo impacta a Estados Unidos, también a México.
México juega un papel central en todo esto. Por ahora, Biden necesita del gobierno de López Obrador para que le ayude a contener la inmigración antes de las elecciones, así que esto define la relación entre los dos países. Y en el futuro, la siguiente Presidenta, sea la que sea, Claudia o Xóchitl, tendrán que lidiar con este asunto: migrantes avanzando hacia el norte, queriendo llegar a Estados Unidos, pero encontrando las puertas cerradas.