«A veces la infancia es más larga que la vida.»
Ana María Matute
El día de ayer, durante la conferencia matutina de la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum, el director general del IMSS, maestro Zoé Robledo, informó que durante este año se construirán los primeros 12 Centros de Educación y Cuidado Infantil (CECI) del instituto en Ciudad Juárez, Chihuahua, lo cual constituye parte de la estrategia que implementará este gobierno para dar atención y cuidado a la primera infancia, sustituyendo al viejo modelo de guarderías y de estancias infantiles que operó en sexenios anteriores; todo ello para beneficiar a las trabajadoras de la industria maquiladora del norte del país y a sus familias. Este programa atenderá a niñas y niños desde los 43 días de nacidos hasta los 4 años de edad.
Los primeros años de vida son fundamentales para el desarrollo integral del ser humano. Durante este período de tiempo, el cerebro forma millones de conexiones neuronales que sientan las bases para el desarrollo de habilidades futuras en áreas como el lenguaje, la cognición y la socialización. Una atención y estimulación adecuada en esta etapa es esencial. La UNESCO destaca que la ampliación de un aprendizaje de la primera infancia de calidad es un medio importante para hacer realidad el derecho a la educación.
Se ha demostrado que la falta de atención y estimulación en los recién nacidos puede tener consecuencias negativas. La malnutrición y la falta de estimulación afectan el desarrollo cognitivo y físico, limitando el potencial del niño. Invertir en educación y cuidado durante los primeros años de vida no solo ayuda al niño, sino también a la sociedad en general. Programas de desarrollo temprano efectivos pueden contribuir a la reducción de desigualdades y promover una sociedad más equitativa y productiva.
El nuevo modelo que se anunció implica un cambio sustantivo en todos los aspectos de atención y cuidado dirigido a niñas y niños en su primera etapa de vida,
primeramente, se abandona el modelo de estancias subrogadas que tienen una óptica primordialmente mercantilista y que se ha comprobado no dan atención cabal a las necesidades de las familias trabajadoras, sino que siguen un enfoque de negocio, desvinculándose de un verdadero servicio social. El programa presentado el día de ayer busca también atender la sobredemanda y la subutilización que existe en las actuales mal llamadas guarderías. A la fecha, el IMSS ha cerrado 123 guarderías subrogadas.
Guardería es un término que alude a la acción de guardar o almacenar algo; la niñez evidentemente no puede caber en esta acepción. Pero la denominación no solamente es una expresión gramatical por la que identificamos una determinada circunstancia o cuestión corpórea, es la forma en la que la concebimos en nuestro entorno, es el reflejo de su enfoque cultural y funcional. Lo que persigue la nueva visión es hacerla acorde a un enfoque de derechos humanos, orientado a la protección integral de la niñez, materializando acciones efectivas sobre educación, cuidados y nutrición. Por eso, la presidenta de la República ha insistido en dejar de lado la concepción de guarderías.
Se plantea que la operación de los CECI se lleve a cabo de tres formas: una bajo la administración del IMSS; otra por empresas y; la última con la participación compartida entre el IMSS y el DIF donde se atenderá incluso a aquellas personas que no cuenten con seguridad social. El arranque de esta estrategia en Ciudad Juárez tiene un gran significado: históricamente muchas mujeres habitantes de zonas fronterizas han recibido múltiples agresiones físicas y psicológicas, llegando a ser violentadas sexualmente e inclusive asesinadas. Los CECI son una política pública de atención a la niñez, pero también un mensaje a las trabajadoras de la maquila de que no están solas, que tienen una presidenta con la prioridad de atender a las mujeres.
