Lo más importante en el negocio deportivo es la innovación y —al mismo tiempo— el entretenimiento. No existe nada más poderoso que la evolución de cualquier industria. Buscar siempre nuevas fórmulas, lleva a resultados diferentes.
Hemos visto cómo —a lo largo de muchos años— la industria del entretenimiento deportivo ha ido en ascenso, aunque todavía existan algunos que siguen pensando que el “deporte cancha” es lo único que importa, y eso no significa que estén en un plano secundario, sino que cada circunstancia es diferente. La cancha y la oficina son un complemento, una sociedad.
Esta semana, la industria del deporte internacional tiene la gran posibilidad de intercambiar ideas en el Sports Summit México, el cual se realizará en la capital del país, con la participación de una gran parte de la industria y diferentes rubros, además de la presencia de personajes importantes, como Jesús Martínez, Joe Aboumrad, Andrea Rodebaugh, Rodolfo Ramírez, Mará José Alcalá, Juan Sebastián Verón, Pável Pardo, Othon Valenzuela, Mariana Gutiérrez, Dorian Roldán Peña, Javier Tebas, Mauricio Sulaimán y Miguel Ángel Gil.
De igual forma, un servidor participará como ponente, exponiendo los temas: Fan Engagement y la evolución de las grandes pasiones mexicanas.
Es un tema, sin duda, importante para la evolución de la industria. Estamos hablando del fan, del consumidor, de ese personaje que sostiene —con su inversión— a la industria deportiva.
Al mismo tiempo, estaremos compartiendo conocimientos de televisión y analizando el futuro de los contenidos deportivos, algo que también impacta en la industria y en el consumidor, al tratar de conocer qué se quiere ver en las diferentes pantallas que hoy existen.
De esta forma, estaremos haciendo una pequeña aportación a la industria, una industria en constante evolución, en donde el dinero, la creatividad y los resultados deportivos se unen para crear productos memorables, en donde el fan al deporte, sin importar cuál sea éste, se debe volver la pieza más importante del negocio.