Quien está evaluando su asistencia a la representación de la Pasión de Cristo en Iztapalapa es la jefa de Gobierno, Clara Brugada. Durante una conferencia de prensa la mandataria fue cuestionada acerca de si tomará vacaciones en esta temporada y si acudirá a la representación que se realiza año con año en la demarcación de la que fue alcaldesa. Brugada Molina se limitó a decir que “estará pensando” si asiste o no, y no hay que olvidar que cuando fue alcaldesa no faltó a este evento e, incluso, llegó a ir acompañada de Claudia Sheinbaum, entonces jefa de Gobierno.
Bikers esperan reunión con el secretario de Movilidad
Nos platican que en días recientes colectivos de motociclistas se reunieron con autoridades de la Secretaría de Movilidad de la Ciudad de México a fin de reforzar las estrategias para evitar que se registren más incidentes de tránsito en donde se vean involucrados bikers; entre las propuestas están tomar en cuenta reportes de baches y coladeras destapadas en las diferentes vialidades de la Ciudad de México. Nos comentan que del reporte de incidencia no se abordó nada y es que el primer acercamiento se realizó sin presencia del titular de la Semovi, Héctor Ulises García Nieto, por lo que esperan que en los siguientes encuentros asista, para que así sean mesas de trabajo y no sólo una reunión de buenas voluntades.
UAEMéx también saca la comida chatarra de sus planteles
Donde también se busca promover una alimentación saludable es en la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), por lo que ya fue prohibida la venta de comida chatarra dentro de las cafeterías institucionales, lo cual ya se observa de forma significativa en los menús de estos espacios. Los estantes y refrigeradores, en los que antes había papas fritas, chocolates, galletas, dulces, refrescos y jugos procesados, ahora ofrecen ensaladas, frutas y verduras. Si bien dentro de la comunidad universitaria hay quienes ven con buenos ojos esta disposición, también están aquellos que critican la medida, pues basta con salir de los planteles y caminar unos cuantos pasos para llegar a una tienda de conveniencia repleta de golosinas y procesados.