Nos dicen que esta semana se dará a conocer una nueva estrategia de defensa de las remesas para evitar que el gobierno estadounidense les aplique una tasa de 3.5%. Nos cuentan que la ofensiva del gobierno de Donald Trump ya preocupa no sólo porque afectaría a los hogares de menores ingresos, sino porque habría un retroceso en los avances contra la pobreza y su efecto en las cuentas externas del país. Nos hacen ver que ayudan a financiar la cuenta corriente de la balanza de pagos para que el país no enfrente desequilibrios. Está por verse si el Banco de México, encabezado por Victoria Rodríguez Ceja, se une al cuarto de guerra o a través de una asesoría, pues además de generar las estadísticas sobre la materia, cuenta con un foro de remesas dentro del Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (Cemla), que puede ser de gran utilidad.
Pulso de transferencias, hoy
Hablando de remesas, nos recuerdan que el Banco de México dará a conocer hoy los flujos recibidos durante abril. Desde finales del año pasado, estas transferencias que realizan los paisanos desde Estados Unidos han visto un comportamiento irregular. Las remesas totalizaron 5 mil 150 millones de dólares en marzo, poniendo fin a cuatro meses seguidos a la baja. En el tercer mes del año, los especialistas señalaron que ese repunte estuvo relacionado con el temor a las medidas migratorias aplicadas por las autoridades que comanda Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional. Aunque la iniciativa para aplicar un impuesto de 3.5% a esos envíos todavía no se reflejará en el resultado de abril, nos anticipan que el dato mostrará el sentir de los connacionales respecto a la incertidumbre que generan las políticas del presidente Donald Trump.
Pleitos arancelarios van para largo
Nos cuentan que a pesar de los fallos y apelaciones que involucran a la política comercial del presidente Donald Trump, el asunto no tiene impacto en los aranceles para la industria automotriz, así como los sectores del acero y aluminio. Las tarifas aplicadas bajo la Sección 232 de la Ley de Expansión Comercial de 1962 (Sección 232) a automóviles, autopartes, acero y aluminio no fueron objeto de la impugnación judicial y siguen vigentes, nos explican. De acuerdo con UBS Financial Services, es probable que el fallo restrinja el uso de aranceles por parte de la administración Trump, a menos de que el gobierno gane la apelación. Sin embargo, se prevé otro aumento de aranceles en el transcurso del verano, tras las investigaciones comerciales de la Sección 232 en actividades industriales como la farmacéutica, de minerales críticos, madera, cobre y semiconductores.