La ruta es clara. Diversos acontecimientos han obligado a la sociedad a voltear hacia Iztapalapa, ubicada al oriente de la Ciudad de México, Iztapalapa cuenta con una población significativa y considerable pues en Iztapalapa viven casi un millón y medio de personas, de los cuales 791,950 son mujeres y 704,838 hombres. Una demarcación a la que le urge ser redignificada, pues durante muchos años fue no solo estigmatizada, sino que, además, era vista como el patio trasero de la Ciudad; a Iztapalapa llegó por convicción y con voluntad de cambiar la realidad de miles que vivían ahí una joven cuyos ideales nunca han zigzagueado. Clara Brugada Molina, la primera alcaldesa de Iztapalapa, quien rescata la zona del oriente de la Ciudad con mayor número de desigualdades y rezago derivados del abandono en que se encontraba la demarcación. Partió de cero, con el objetivo de hacer justicia territorial, espacial y recuperar el espacio público, invirtió como en ninguna otra alcaldía se ha invertido en infraestructura deportiva, construyó albercas, lavanderías públicas gratuitas, servicios de atención a la salud mental, canchas de tenis, pistas de tartán, pistas de hielo, velódromos, acuario, en pocas palabras llevó desarrollo, oportunidades, espacios dignos a los históricamente olvidados.

El progreso, avance y transformación que ha vivido Iztapalapa está a la vista, ha sido referencia para otras alcaldías no solo de México sino de otros países del mundo, el oriente de la Ciudad dejó de ser el patio trasero, eso fue gracias al esfuerzo, constancia de un equipo de trabajo sí, pero que tiene una mujer que rompió con la idea de que las mujeres somos la columna vertebral y se colocó en el cerebro de estas transformaciones, tal como se lo propuso en su juventud, lo logró. Hoy Clara va por las clases medias, su reto será romper con los prejuicios de clase, combatir a la derecha y su discurso de separación clasista que han pretendido permeé hasta dividirnos a los habitantes de esta Ciudad y valientemente hemos resistido, de manera paralela debe construir el segundo piso de la transformación, dar continuidad y progreso a lo social a esos puntos fuertes en los que tanto Claudia Sheinbaum como Martí Batres han puesto acento en sus gobiernos.

Habrá quien se pregunte si las Utopías tendrán el mismo éxito en alcaldías sin el rezago de Iztapalapa, la respuesta no debe suponer mucho análisis, en la Ciudad, el programa “Pensión Universal para Adultos Mayores” lo cobran desde el poniente hasta el oriente ¿Por qué? Porque tienen derecho; una persona que tiene derecho a recibir cualquier apoyo o servicio de forma universal y gratuita lo va a reclamar y lo va a ejercer, no importando su código postal, en el poniente también hay cientos de niñas, niños, jóvenes, adultos y adultos mayores que tienen necesidad de realizar actividades deportivas, acuáticas, rehabilitación, de acceder a un sistema público de cuidados, disfrutar de la cultura, de vivir en bienestar y si esto fuera posible hacerlo de forma gratuita optarían por esa opción. Dar por sentado que ser de clase media o por vivir en una alcaldía del poniente te obliga a pagar por cada servicio o por cada actividad recreativa es un error y un mal cálculo político pues hasta quienes pueden pagar también merecen acceder a espacios públicos, gratuitos y dignos.

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