Las deportaciones masivas de mexicanos desde EU han estado en el centro de su política migratoria desde hace casi dos siglos:
1. En 1848, cuando EU se anexionó California, Arizona, Nuevo México, y Texas, el Tratado de Guadalupe Hidalgo establecía que los mexicanos nacidos en el territorio que se convirtió en EU podría permanecer del lado norte. Sin embargo, muchos fueron deportados, o se les impidió el reingreso a EU.
2. En 1929-1939, con la Gran Depresión, cerca de 20% de la población mexicana y mexicanoamericana fue expulsada. Fue un perfilamiento racial y xenofóbico, pues 60% de los deportados eran estadounidenses por nacimiento. Surge ‘el problema mexicano’: una construcción que los ubica como inmigrantes en su propia tierra, aun si nacieron en lo que hoy es EU.
3. En 1954, la Operación ‘Espalda Mojada’ bajo Eisenhower. Llegaron a deportar 1.3 millones de mexicanos en un solo año. Había una relación de esclavitud laboral de la mano de obra mexicana, y aún si había nacido en EU, la población no-blanca era considerada como trabajador indocumentado.
4. A partir de 1996, con la ley IIRIRA, se estableció la deportación masiva como el corazón de la política de inmigración de EU. Sus asesores le recomiendan a Clinton ‘fortalecer su imagen de duro contra el crimen, llevando a cabo deportaciones récord de criminales indocumentados’. Obama y Biden deportaron a personas con órdenes de remoción, o recién llegados a EU.
La entrada de una persona a EU sin papeles pasó de ser una falta administrativa, a un delito. Hoy Trump equipara inmigrante con ilegal y con delincuente, y los coloca como objeto de una cacería humana respaldada por la población que ve la inmigración como una amenaza a su estilo de vida.
Prometió llevar a cabo ‘la más grande deportación en la historia de EU, pero hasta el 29 de abril de 2025, al cumplirse los primeros 100 días de su segundo mandato, se ha quedado corto respecto de los presidentes Barack Obama y Joseph Biden.
¿Significa esto que no podrá cumplir con su objetivo? Es demasiado temprano para saberlo. Previsiblemente la cacería seguirá, con los migrantes como moneda de cambio y chivos expiatorios en la relación bilateral EU-México. El solo anuncio de las campañas de deportación masiva infunde terror en la población que podría ser deportada, por lo cual un porcentaje importante de ellos opta por ‘auto deportarse voluntariamente’ a su país de origen.
En abril, en un mensaje en redes sociales, el cardenal de Boston, Robert Francis Prevost Martínez retuiteaba un comentario de otro usuario, interpelando a Trump y Bukele sobre las deportaciones de migrantes: “¿No ves el sufrimiento de tus vecinos? ¿No te das cuenta del dolor, la miseria, el miedo y la ansiedad tan reales que estas injustas acciones y políticas gubernamentales están causando?". Hoy se ha convertido en el Papa León XIV un estadounidense cosmopolita, hijo de francés y española, con nacionalidad peruana, lo que parece un desafío al nacionalismo agresivo de Trump.
PD. Mi reconocimiento y admiración para Carmen Aristegui @aristeguicnn, y para Ernesto Zedillo Ponce de León. Dos mexicanos que han contribuido enormemente al fortalecimiento de la democracia en México, y cuyas voces son para mí de indispensable atención y análisis, especialmente en este tránsito tan difícil.
Profesor asociado en el CIDE @Carlos_Tampico