La Secretaría de Anticorrupción y Buen Gobierno convocó el pasado 25 de noviembre a un taller sin precedentes para analizar la regulación del cabildeo en México. No existe antecedente reciente de un ejercicio que reuniera a autoridades federales, sector privado, organizaciones especializadas y sociedad civil para discutir cómo profesionalizar la interlocución pública bajo principios de integridad y transparencia.
La secretaria Raquel Buenrostro subrayó que este proyecto es de la mayor importancia para la dependencia que encabeza. Señaló que el cabildeo debe resguardarse como un proceso legítimo de participación en la creación de políticas públicas y destacó la importancia de fortalecer la confianza entre sector público, sector privado y sociedad. Cerró con un mensaje que marcó el tono del encuentro: “Esto apenas empieza”, dejando claro que este es solo el punto de partida de un esfuerzo que exigirá constancia y corresponsabilidad.
Por su parte, el subsecretario Alejandro Encinas destacó que el cabildeo es esencial para mejorar la calidad de la toma de decisiones públicas y para resguardar los procesos institucionales que las sostienen. Subrayó la importancia de escuchar información sólida y contrastar perspectivas para que la deliberación sea más completa y las decisiones públicas estén mejor fundamentadas.
El taller permitió además conocer experiencias internacionales. La OCDE presentó estándares y referencias comparadas que sirven como marco general de buenas prácticas. Francia, Chile y España, por su parte, compartieron cómo funciona el cabildeo en sus países y cuáles consideran los retos más importantes. En Chile, la presencia conjunta de autoridades y sector privado permitió conocer una visión completa sobre lo que ha funcionado y lo que no al implementar su regulación, mostrando la necesidad de ajustar normas, cerrar vacíos y anticipar efectos no deseados. Desde España se explicó la compleja ruta para construir una regulación viable y aplicable. Escuchar estas experiencias dejó claro que México no parte de cero y que incorporar lecciones de otros países ayudará a evitar errores ya documentados.
Como eje central del evento se presentó el Dossier Cabildeo en México: Transparencia y Piso Parejo, que reúne buenas prácticas internacionales, recomendaciones de la OCDE y elementos mínimos para un sistema de integridad y trazabilidad. Su contenido refuerza que cualquier regulación funcional debe ser clara, proporcional y ejecutable.
Desde el sector privado planteamos una idea fundamental. Para avanzar hacia un modelo sólido, es indispensable trazar una frontera clara e inconfundible entre el cabildeo y la corrupción. El cabildeo se basa en evidencia, argumentos verificables y procesos institucionales abiertos. La corrupción, en cambio, implica opacidad, privilegios indebidos y beneficios personales. Confundir ambos conceptos erosiona la confianza pública y desacredita a quienes ejercemos esta actividad con integridad.
También se destacó que la interlocución empresarial opera bajo controles estrictos. Las compañías que participan en estos procesos requieren certificaciones anticorrupción, auditorías de cumplimiento, trazabilidad, seguros de responsabilidad y protocolos de integridad que aseguran prácticas transparentes y verificables. Este nivel de exigencia refleja el compromiso serio del sector privado con una participación responsable y apegada a la legalidad.
En ese contexto, la transparencia se entiende no como un obstáculo, sino como el elemento que articula todos estos esfuerzos. Saber quién presenta qué, con qué evidencia y con qué propósito fortalece la confianza pública y mejora la calidad de la deliberación. La transparencia no inhibe la conversación; la hace posible.
México tiene hoy una oportunidad única y muy valiosa. Un marco regulatorio claro puede reducir la incertidumbre, nivelar el piso para todos los actores y mejorar la calidad de las decisiones públicas. Pero ello dependerá de que gobierno y sector privado permanezcan en la mesa, colaboren en reglas claras y sostengan un diálogo continuo y funcional. Ningún actor puede avanzar solo.
Si este ejercicio inédito marca el camino, México puede perfilarse como un referente en la materia, apoyado en transparencia, confianza y una participación responsable. Y como recordó la Secretaria Buenrostro, esto apenas empieza.
Presidente de la Asociación Nacional de Profesionales del Cabildeo y Asuntos Públicos (PROCAB)
Gustavo Almaraz Petrie

