Debo de aceptar que, de entrada, tuve sensaciones encontradas. En primer lugar, me pareció excelente que un futbolista de la categoría de James Rodríguez llegara a la Liga MX.
Instantes después, fue imposible no pensar ¿qué James jugará en nuestro torneo? Suena rara la pregunta, pero es válida, como es real la diferencia entre el Rodríguez vestido con la camiseta colombiana y el de sus últimos clubes.
Con su selección, una luz absoluta; con sus equipos, desempeños más que vulgares para alguien de su categoría.
Al menos hasta ahora, hemos visto al James que defiende a la selección de Colombia.
Los fríos números así lo demuestran: Seis partidos jugados (cinco como titular), con saldo de un gol y cuatro asistencias.
Es cierto que las estadísticas no siempre reflejan la realidad (revisen los números de Patrick Mahomes en este Super Bowl, como ejemplo), pero —en este caso— son tan ciertos como que el agua moja. James Rodríguez es el futbolista más importante del líder en el Clausura 2025.
Por si faltaran muestras del compromiso del colombiano con su equipo, basta verlo en acción. James no sólo hace jugar a los demás, sino que también participa del trabajo defensivo, dejando de lado cualquier pose de diva.
Evidentemente, no se mata como un chavito de 25 años, ni corre lo mismo que Nicolás Fonseca, pero trabaja en pos del bien colectivo. Por supuesto, su aporte en la creación de juego es su principal misión y —hasta hoy— la está cumpliendo, con el compromiso que el brazalete de capitán exige.
Tras la victoria ante el Atlético de San Luis, que les otorgó el primer lugar, James expresó la felicidad que siente por estar en nuestro país y cómo eso se ha visto reflejado en la cancha.
Pero el ex del Real Madrid —además— invitó al país a disfrutar mañana el duelo en el que se medirán ante el América.
Cuando se publicó el calendario de este campeonato, nadie circuló con ansias un América-León de media semana. Hoy, es uno de los platillos más suculentos de esta fase regular, y James —el gran responsable— lo sabe.
Quizá, un tipo de esa clase lanza ese mensaje porque entiende la importancia de brillar en los grandes momentos.
Tal vez, el cafetalero anunció desde el domingo que debemos estar atentos a su actuación ante el tricampeón.
Lo que es un hecho es que este tipo de contrataciones elevan el nivel de interés en nuestra competición y eso siempre será bueno. James Rodríguez está cumpliendo. Otra buena noticia es que nos falta disfrutar de Sergio Ramos.
Adendum. “Perdió mi Azul, pero me gusta mucho el equipo de Vicente”, me escribió Knut, y estoy absolutamente de acuerdo.
