El tetracampeonato está en la bolsa del América. Tras lo visto en la Jornada 3, así parece. Las Águilas por fin utilizaron (casi) a su primer equipo y le pasaron por encima a Santos (quizá, la peor versión en la historia de los Guerreros, pero en fin). Además, sus dos principales oponentes se habrían bajado de la lucha por el título de manera anticipada. Cruz Azul y Toluca ya no lucen como se proyectaba.
Las salidas de Martín Anselmi de La Máquina y Tiago Volpi de los Diablos podrían ser el golpe de timón que decante el rumbo de este torneo. Los Cementeros perdieron al hombre que le dio identidad al equipo y que logró convencer al plantel de jugar de una manera arriesgada y espectacular. El caos que rodeó su salida se vio reflejado en el empate ante el Puebla. Los resultados no han llegado a La Noria y el futuro no parece halagüeño.
La llegada de Antonio Mohamed parecía el elemento que le hacía falta a los toluqueños para ser favoritos a levantar el trofeo, pero “éramos muchos y parió la abuela”.
Tiago Volpi dejó al club para volver a Brasil por problemas personales. Este Toluca siempre adoleció en la zaga, pero Volpi —generalmente— aparecía para rescatarlo.
El viernes, en Mazatlán, quedó muy claro que contratan a un guardameta de jerarquía o están fuera de la carrera por el campeonato.
¿No hay otros equipos con aspiraciones? Por supuesto que sí.
Tigres y Monterrey tienen muy buenos planteles, pero me parece que —a priori— estaban un escaloncito por debajo del Cruz Azul y el Toluca. Pero ojo, nada de esto significa algo.
El Clausura 2025 es demasiado joven como para vaticinar algo. Pero de que el camino se le allanó al América, no hay duda.
Este equipo tiene en sus manos seguir conquistando títulos. Mantener la tensión competitiva depende absolutamente de ellos.
André Jardine ha entendido a la perfección nuestro sistema de competencia y, por eso, “desechó” las dos primeras fechas. Aún así, su escuadra es líder del certamen.
Hoy por hoy, el gran rival del América parece ser el exceso de confianza. Es muy pronto, pero hay señales...
Adendum. “Odio al futbol, ya no quiero a Martín Anselmi y si el América es tetracampeón, me voy del país”, eso me mandó Knut (seguramente crudo) el domingo temprano.
No le contesté, tal vez hice mal.
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