Un aire de incertidumbre y rumores se respira en Palacio Nacional. Ayer, en el evento preparado para el mensaje por el Tercer Informe de Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, un hombre atrajo y robó reflectores al Ejecutivo federal: Julio Scherer Ibarra.
Desde la noche previa surgió la versión de que Scherer, amigo e incondicional de López Obrador, había renunciado a la Consejería Jurídica de la Presidencia de la República. En Palacio nadie lo confirmó, “son rumores”, dijeron.
A las 10:12 horas, el Presidente llega al Patio Mariano de Palacio Nacional acompañado por su esposa Beatriz Gutiérrez Müller. Se detienen al pie de la estatua de Benito Juárez, forjada con el hierro de los cañones arrebatados en batalla al Ejército Conservador.
Ahí, un militar entona ante el Presidente el Toque de silencio en honor a las casi 260 mil víctimas mortales de la pandemia del Covid-19 en el país.
López Obrador y su esposa suben las escaleras para llegar al Recinto de Homenaje a Benito Juárez, lugar donde vivió y murió el Benemérito y referente político del Presidente.
En la sala ya esperan 30 invitados al mensaje. En la última fila se encuentra Julio Scherer; en primera fila está Claudia Sheinbaum.
Y ahí está Sheinbaum, pero no es la única “corcholata” del Presidente para 2024; detrás de ella están el canciller Marcelo Ebrard, Tatiana Clouthier, secretaria de Economía y Rocío Nahle, titular de Energía. Un informe lleno de consentidas y relegados.
Ya en su mensaje, el presidente López Obrador presume un listado de logros en materia económica, de combate a la pandemia y de seguridad. “¡Tengan para que aprendan!”, les manda decir el Mandatario a los tecnócratas neoliberales, lo que hace que los aplausos retumben en el salón.
Teniendo de fondo una pintura de Benito Juárez, el Ejecutivo agradece el apoyo.
Al final de su mensaje, de 55 minutos y 34 segundos, el Mandatario federal asegura que cuando esté entregando la Banda Presidencial dirá a los cuatro vientos: “Misión cumplida, me voy a Palenque, les dejo mi corazón”. Con estas frases, el presidente López Obrador termina su mensaje.
Beatriz Gutiérrez lo mira y mientras el presidente López Obrador rinde honores al Lábaro Patrio, le dice con señas si escuchó el mensaje de su esposo, a lo que Scherer mueve la cabeza a manera de afirmación y esboza una pequeña sonrisa.
Esperándola, López Obrador toma de la mano a su esposa y se retira.
Así es como termina el mensaje del Informe del tercer año del presidente López Obrador, al que ha llamado “A la mitad del camino”.
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