Organizaciones civiles integradas por padres de familia marcharon para exigir al Poder Legislativo interponer una controversia constitucional que detenga la distribución y uso de los nuevos libros de texto gratuitos y anule el plan de estudios de la Nueva Escuela Mexicana.
Los grupos se manifestaron con una caminata desde el Jardín Oaxaca, en la alcaldía Venustiano Carranza, hasta la Cámara de Diputados, con el argumento de que la enseñanza de los niños del país tiene que ser de calidad y que los materiales educativos deben ser adecuados y ajustarse a estándares pedagógicos y éticos.
Además de esta acción, los padres de familia también se encuentran recolectando firmas a través de la plataforma Actívate.org.mx para detener la entrega de los materiales. Informaron que al día de hoy han logrado recolectar casi 60 mil firmas en todo México.
“Nuestro problema no es sólo el uso de estos libros con fines políticos y de adoctrinamiento en temas inapropiados para menores como lo es la ideología de género. También es la carencia de temas esenciales en el desarrollo académico de nuestros niños. No podemos ignorar la ausencia casi total de matemáticas, una base fundamental para su crecimiento intelectual.
“Incluso en las materias que sí se incluyen en estos libros encontramos una serie de errores preocupantes. Los autores parecen negar la responsabilidad al no abordar estos problemas de manera oficial. Es evidente que estos libros no han pasado por los rigurosos procesos de calidad necesarios para la educación de nuestros hijos. Desde la revisión de estilo hasta la planificación pedagógica, se necesitan expertos que comprendan las necesidades y el contexto de los niños en sus distintas etapas formativas”, explicaron las ONG mediante un documento que fue entregado a las diferentes bancadas en el Congreso.
También demandan que, pese a que existen dos amparos concedidos por la Suprema Corte de Justicia para Chihuahua y Coahuila, más una extensión de sentencia para ordenar que los libros no sean repartidos, “en un acto deliberado de desacato del gobierno federal, los libros han sido distribuidos en todo el territorio nacional”.