Más Información
La sicóloga forense Dalia Luna Muñoz alerta de una actual “espectacularización” social de los feminicidas como en los casos ocurridos recientemente en Iztacalco o Atizapán, quienes asesinan por la impunidad de saber que no va a pasar nada y que desean ser reconocidos.
Para la integrante del colectivo Wiccan Forense, hay un sin fin de razones por las cuales una persona puede convertirse en un feminicida o asesino serial, por lo que pide evitar crear falsos perfiles de personalidad sólo con notas periodísticas.
Con más de 20 años de experiencia, Luna Muñoz pide no replicar los mensajes que generan morbo, “ellos quieren ser vistos, no deberíamos darles eso, ellos están dañando a las mujeres, las están asesinando.
Lee también: Familiares de víctimas de feminicidios colocan un memorial frente al Palacio de Gobierno en Edomex
“Para que yo pueda realizar un perfil sicológico es necesario que primero tenga el caso de primera mano, luego poder realizar una serie de entrevistas para conocer al feminicida serial, no podemos andar dando nuestra opinión sobre un caso sólo por lo que leemos en notas periodísticas o lo que sale en redes sociales”, explica Luna Muñoz.
La especialista denuncia que diversos expertos hablan sobre casos sin ningún cuidado, periodistas sacan notas revictimizando a las mujeres y también a las familias sin medir el daño que esto puede causar.
Puntualizó que “Los feminicidas son sanos hijos del patriarcado no son inimputables porque no tienen enfermedades mentales, la defensa trata muchas veces de simular esas enfermedades para recibir sentencias menores, pero no las tienen”.
Señala que calificar a un feminicida como “esquizofrénico” criminaliza a las personas con enfermedades mentales.
Lee también: Hasta el 29 de febrero se han registrado 112 presuntos feminicidios en México, reporta Secretariado Ejecutivo
Finalmente, pidió ser empáticos con las familias de las víctimas, quienes han atravesado un proceso de revictimización desde que no se les consideró su denuncia para iniciar una investigación, el olvido institucional por el que no se estaba tratando el paradero de las víctimas, hasta que son las propias familias quienes localizan los restos de sus hijas desaparecidas.