La quinta misión general del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, en su ley orgánica estipula: “Auxiliar a la población civil en caso de necesidades públicas y en caso de desastre, prestar ayuda para el mantenimiento del orden, auxilio de las personas y sus bienes y la reconstrucción de zonas afectadas”.
Esta misión se cumple mediante la aplicación del reconocido por todos Plan DN-III-E, el que para su materialización en ocasiones requiere del envío de apoyos de diferentes insumos a las zonas afectadas, por lo que es indispensable contar con infraestructura adecuada que permita realizar en el menor tiempo posible y de manera eficiente las tareas de acopio y distribución de ayuda a la ciudadanía.
Bajo esta premisa, con la renovación de las instalaciones de la Base Aérea Militar No. 1 ubicada en Santa Lucía, Estado de México, que formó parte de la construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, se construyó un hangar de acopio, destinado a concentrar todos aquellos materiales e insumos necesarios para brindar apoyo a la población ante desastres.
Esta importante instalación que fue activada el 4 de junio de 2022, funciona las 24 horas y los 365 días del año, cuenta con una capacidad de almacenamiento de 2,172 metros cúbicos, una plataforma de servicio que facilita la carga y descarga de las aeronaves y vehículos que transportan los recursos a cualquier parte del territorio nacional u otros países, dando amplia flexibilidad y generando capacidades estratégicas al Plan DN-III-E.
Desde su establecimiento, esta importante instalación, ya ha sido puesta a prueba en varias ocasiones como:
El envío de 108.5 toneladas de ayuda humanitaria a la provincia de Kahramanmaras, Turquía, el 14 de febrero de 2023, con motivo del sismo de 7.8 grados que afectó a dicha nación.
Y recientemente, debido a las afectaciones en el estado de Guerrero por el huracán OTIS, el traslado mediante un puente aéreo de casi 600 toneladas de diversos insumos a la ciudad de Acapulco, con el que se pudo constatar su importancia estratégica en todo el esquema de protección civil nacional.
Con esta infraestructura se ratifica el firme compromiso de la Secretaría de la Defensa Nacional, para contribuir con los gobiernos y diversas autoridades en las tareas de auxilio a las personas que viven una situación de emergencia provocada por desastres naturales; también es una muestra más, de la preocupación por preservar la integridad y el bienestar de los mexicanos.