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Ante el desalojo del Hospital General de México “Dr. Eduardo Liceaga” por la fuga de oxígeno medicinal, la directora general del nosocomio, Guadalupe Mercedes Lucía Guerrero Avendaño, afirmó que no se puso en riesgo la seguridad de los pacientes ni del personal.
También calificó el incidente como inusual, y explicó que se debió a que en el consultorio cuatro del Servicio de Urgencias Médico Quirúrgicas, durante el proceso de cambio de manguera de una toma de oxígeno a otra, el émbolo de la conexión Plarre cedió.
El accidente se registró aproximadamente a las 00:10 horas, y después de que se reemplazó la pieza, el consultorio estaba en operación a las 02:28 horas, aseguró.
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“Al recibir el reporte, el personal de mantenimiento tomó acciones inmediatas, cerrando la llave secundaria de flujo del consultorio en cuestión. La pieza se reemplazó y el consultorio volvió a estar plenamente en operación”, refirió en un comunicado.
También explicó que el personal de enfermería actuó de inmediato, aplicando el protocolo de seguridad en colaboración con el equipo de protección civil del hospital; y la evacuación se realizó como una medida preventiva.
Detalló que el equipo recibe mantenimiento conforme a la normatividad, ya que “la seguridad y bienestar de las y los pacientes y el personal, así como el estricto apego a la normatividad es nuestra máxima prioridad”.
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