Un fiscal de muy buen humor, Alejandro Gertz Manero, ofreció la mañana de este miércoles la conferencia donde la FGR a su cargo toma el caso del rancho de Teuchitlán, buscadoras y colectivos han denunciado que era un lugar de adiestramiento y exterminio por parte del crimen organizado. Gertz no perdió el buen humor.
El fiscal general de la República puso en la mira sin dudarlo al menos omisiones, cuando no colusión y contubernio de autoridades locales y municipales. Descuidos o desaseo de la fiscalía de Jalisco, así como señaladamente participación de elementos de la policía municipal de Tala relacionados con la operación del lugar.
Dijo, sí, que según los primeros informes de la fiscalía hay restos humanos en el lugar. Evadió responder si el lugar era un campo de exterminio o de adiestramiento, ni si podía establecerse cuántas personas murieron allí.
El fiscal que cumple en octubre 86 años, no perdió la paciencia al hablar con la prensa. Respondió a preguntas de EL UNIVERSAL, CNN, Reuters y medios de la prensa nacional. No hubo youtubers.
Desde la prensa se le lanzó una provocación: Ayotzinapa lleva diez años y aún no se sabe qué pasó. La respuesta, con un sonrisa fue “esto va en serio”.
No hubo mayores datos. Aún no los tiene la FGR. “No tengo esos datos”, “aún no lo sabemos”. El fiscal toreó a los reporteros al explicar que la FGR apenas tomará las riendas de la investigación.
Quisieron hacer que respondiera al senador Fernández Noroña, en el sentido de si los zapatos del rancho eran o no de desaparecidos. “No me meto en asuntos políticos”.
No fue como la conferencia de Jesús Murillo Karam, donde hubo una “verdad histórica” sobre la desaparición de los 43 normalistas.
La conferencia empezó pasadas las 10:30 de la mañana, hora en la que fue convocada. Duró casi una hora. No hubo un “ya me cansé”.

kicp