Analistas políticos destacaron el nombramiento de la virtual presidenta, Claudia Sheinbaum, en favor de Leticia Ramírez como nueva coordinadora general de Asuntos Intergubernamentales y Participación Social, al señalar que esa labor ya la había realizado tanto en el Gobierno de la Ciudad de México como en Palacio Nacional en este sexenio, por lo que cuenta con experiencia.
Sin embargo, en el caso del exministro Arturo Zaldívar manifestaron sus reservas sobre su nombramiento como coordinador general de Política y Gobierno, al señalar que viene de un proceso de golpeteo con la oposición y en medio del escándalo de presiones a jueces y magistrados.
Hernán Gómez, analista político y periodista, comentó a EL UNIVERSAL que Leticia Ramírez “es una funcionaria comprometida, que ya trabajó en Presidencia de la República dando buenos resultados.
“El nombramiento de Zaldívar es preocupante por el cúmulo de evidencias existentes sobre su participación dentro de los negocios judiciales y presiones a los jueces que tuvieron lugar durante los últimos años”.
Por fortuna, puntualizó, no logra su objetivo de ser consejero Jurídico de la Presidencia y, desde esa posición, asumir un papel similar al que en su momento desempeñó Julio Scherer Ibarra.
“La interrogante ahora es si el puesto de coordinador político que se le ha dado estará dotado de poder real o si veremos a un niño jugando Nintendo con el aparato desconectado. Por el bien de México y de la propia 4T, ojalá estemos ante el segundo escenario”, apuntó.
Con respecto a Leticia Ramírez, el analista político Alberto Aziz Nassif coincidió en que se trata de una funcionaria con experiencia y dijo que “ella regresa a lo que hacía antes, se reincorpora a lo que sabe hacer en Presidencia de la República, porque en la SEP al parecer no hizo gran cosa.
“El caso complicado es con Arturo Zaldívar, que se volvió, me parece, una persona incómoda para Sheinbaum y estaba medio comprometida con él a darle alguna posición, ya que él renunció anticipadamente al cargo de ministro y se incorporó rápidamente a la campaña presidencial”, comentó.
Recordó el tema de la denuncia de jueces y sólo lo pone en una situación políticamente complicada, en términos de credibilidad, legitimidad, por lo que puede ser un cargo temporal y después lo pueda mover a otra posición, y por lo pronto le da un cargo de asesor político, que habría que ver los resultados que logra.
“Porque políticamente no ha sido muy acertado en su comportamiento, en sus declaraciones, el entorno de su salida de la Corte, las acusaciones de jueces. Es una persona colérica, que se enoja mucho. Creo que es un cargo más de membrete, cuyo perfil es contrario al discurso de Sheinbaum en el sentido de abrirse al diálogo”, concluyó.