Londres. Un adolescente acusado de y herir a otras 10 personas en una serie de apuñalamientos en Reino Unido durante una clase de baile con temática de realizada en julio será juzgado a principios del próximo año, dijo un juez el miércoles.

Axel Rudakubana, de 18 años, será llevado a juicio el 20 de enero en la Corte de la Corona de Liverpool por tres cargos de asesinato, 10 cargos de intento de asesinato y cargos adicionales relacionados con la posesión del veneno ricina y de un manual de Al-Qaeda.

Familiares y amigos de las niñas asesinadas y heridas, así como una de las instructoras de la clase que resultó gravemente herida, asistieron en persona a la audiencia, mientras Rudakubana aparecía por enlace de video desde la prisión de Belmarsh, en el sur de Londres.

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Gente mira los homenajes dejados en la escena de un ataque con puñaladas en el cruce con Hart Street en Southport, Gran Bretaña. Foto: EFE
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Rudakubana, quien no se ha declarado culpable o inocente, continuó negándose a hablar en la corte, como lo ha hecho en audiencias anteriores. Se puso la sudadera sobre la cara y no se identificó ni reconoció al juez.

“Sé que puedes escucharme porque el agente detrás de ti dijo que puede oírme”, le dijo el juez Julian Goose a Rudakubana, que no respondía.

Se espera que el juicio dure de cuatro a seis semanas. Se programó otra audiencia para el 12 de diciembre.

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Fotografías de las víctimas del ataque con cuchillo de Southport se exhiben entre homenajes florales durante una vigilia para las víctimas. Foto: EFE
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Rudakubana fue acusado en agosto de asesinar a tres niñas (Alice Dasilva Aguiar, de 9 años, Elsie Dot Stancombe, de 7, y Bebe King, de 6) y de apuñalar a otras 10 personas el 29 de julio en la ciudad costera de , en el norte de Inglaterra.

El mes pasado, fue acusado de cargos adicionales por la producción de una toxina biológica, llamada ricina, y la posesión de información que podría ser útil para una persona que comete o prepara un acto de terrorismo por tener el manual en un documento en su computadora.

La policía señaló que los apuñalamientos no han sido clasificados como actos de terrorismo porque el motivo aún no se conoce.

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ss/mcc

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