Agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) deportaron a una menor de 2 años que cuenta con la nacionalidad estadounidense, junto con su madre nacida en Honduras, indicaron sus abogados.
En otro caso reciente, el ICE también expulsó a la madre, de origen cubano, de una niña de 1 año de edad, separándolas indefinidamente.
Los casos plantean preguntas sobre a quiénes se deporta y por qué, y se producen en medio de una batalla en los tribunales federales sobre si las medidas contra la inmigración del presidente Donald Trump han ido demasiado lejos y demasiado rápido a expensas de los derechos fundamentales.
Los abogados de ambos casos contaron cómo sus clientes fueron arrestadas en registros de rutina en las oficinas del ICE, sin tener prácticamente ninguna oportunidad de hablar con sus abogados u otros familiares, antes de ser deportadas en los siguientes dos o tres días.
Un juez federal de Luisiana planteó preguntas sobre la deportación de la niña de 2 años, diciendo que el gobierno no ha demostrado haberlo hecho en forma adecuada.
La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) dijo en un comunicado que el caso, así como otro ocurrido en Nueva Orleans y también relacionado con la deportación de una menor con ciudadanía estadounidense, son un “abuso de poder impactante, aunque cada vez más común”.

Programan audiencia del caso para el 16 de mayo
Los abogados del padre de la niña insistieron que él deseaba que la menor permaneciera con él en Estados Unidos, mientras que el ICE señaló que la madre deseaba que la niña fuera deportada con ella a Honduras, afirmaciones que no fueron examinadas plenamente por el juez federal de distrito en Luisiana, Terry Doughty.
En una orden emitida el viernes, Doughty programó una audiencia para el 16 de mayo “con la intención de disipar las fuertes sospechas de que el gobierno simplemente deportó a una ciudadana estadounidense sin ningún proceso significativo”, escribió.
La madre, nacida en Honduras, fue arrestada el martes junto con la niña de 2 años y su hermana de 11, nacida en Honduras, en una cita de registro en una oficina del ICE en Nueva Orleans. Aparentemente, la madre y la niña de 11 años tenían órdenes de deportación pendientes. La familia vivía en Baton Rouge.
Doughty hizo un llamado el viernes a los abogados del gobierno para que hablaran con la mujer mientras volaba en un avión de deportación, sólo para que le devolvieran la llamada menos de una hora después, diciéndole que la conversación era imposible porque “acababa de ser liberada en Honduras”.
En un documento presentado ante la corte el jueves, los abogados del padre dijeron que el ICE indicó que retenía a la niña de 2 años para inducir al padre a entregarse. Sus abogados no describieron su estatus migratorio, pero señalaron que delegó legalmente la custodia de sus hijas a su cuñada, que es ciudadana estadounidense y que también vive en Baton Rouge.
Frenan deportación de niña de 2 años estadounidense a Honduras
Sobre este caso, la presidenta Honduras, Xiomara Castro, informó que fue notificada de la resolución del juez Terry Doughty, de no deportar, junto a su madre hondureña, a la menor de 2 años nacida en Estados Unidos.
En una publicación en su cuenta de X, la mandataria ofreció el respaldo de su gobierno a la madre de la menor en las decisiones que tome, e informó que ordenó dar seguimiento a las órdenes del juez.
Indicó que el juez citó a la audiencia del próximo 16 de mayo a la directora de la Oficina de Reubicación de Refugiados del gobierno de Estados Unidos, Mellissa Harper.
Detienen a mujer cubana en una cita programada en oficina del ICE
Mientras tanto, en Florida, una mujer nacida en Cuba, madre de una niña de 1 año y esposa de un ciudadano estadounidense, fue detenida en una cita programada de registro en una oficina del ICE en Tampa, informaron el sábado sus abogados.
Heidy Sánchez fue retenida sin ninguna comunicación y enviada en un avión a Cuba dos días después. Ella aún amamanta a su hija, que sufre convulsiones, indicó su abogada, Claudia Cañizares.
Cañizares dijo que, la mañana del jueves, trató de presentar documentación ante el ICE para impugnar la deportación, pero el organismo se rehusó a aceptarla, afirmando que Sánchez ya se había ido, aunque Cañizares dijo que no creía que fuera cierto.
Cañizares le dijo al ICE que planeaba reabrir el caso de Sánchez para ayudarla a permanecer legalmente en Estados Unidos, pero el organismo le dijo que la mujer podía seguir su caso desde Cuba.

“Pienso que siguen órdenes según las cuales deben retirar a una cierta cantidad de personas al día y, honestamente, no les importa”, dijo Cañizares.
Sánchez no es una criminal y tiene sólidos argumentos con bases humanitarias para que se le permita permanecer en Estados Unidos, indicó la abogada, pero el ICE no toma esto en cuenta cuando debe cumplir con lo que, en su opinión, son parámetros de deportación.
Sánchez tenía una orden de deportación pendiente, derivada de su inasistencia a una audiencia en 2019, por la que fue detenida durante 9 meses, indicó Cañizares. Aparentemente, Cuba se rehusó a aceptarla en aquel momento, por lo que fue liberada en 2020 y se le ordenó mantener una agenda regular de registros ante el ICE, explicó la abogada.
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