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París.— El juicio que inició ayer contra el expresidente francés Nicolas Sarkozy, acusado de corrupción y tráfico de influencia, fue aplazado hasta el jueves para dar tiempo a que se realice un examen médico a uno de los coacusados.
El tribunal correccional de París decidió ordenar un examen médico del exjuez Gilbert Azibert, de 73 años, que no compareció a la audiencia por razones médicas.
Dependiendo de los resultados, el tribunal tendrá que decidir el jueves a las 13:00 horas si mantiene la audiencia a través de una videoconferencia —a la que la defensa se opone tajantemente— o si pospone la audiencia.
Casi siete años después de que saliera a la luz este caso conocido en Francia como el de las Escuchas, Sarkozy compareció ante un tribunal de París por presuntamente haber intentado corromper al juez Azibert a través de su amigo y abogado de siempre, Thierry Herzog.
Sarkozy es el primer expresidente de Francia en sentarse en el banquillo de los acusados. Antes de él, sólo un expresidente francés, el mentor político de Sarkozy, Jacques Chirac, ha tenido que afrontar la justicia después de dejar el cargo, pero debido a su mala salud Chirac nunca compareció ante la Corte.
Sarkozy, presidente de 2007 a 2012, niega los cargos de los que se le acusa y prometió que se mostrará combativo en este juicio. De ser declarado culpable, Sarkozy, quien se retiró de la política tras su derrota en la carrera al Elíseo en 2016, podría ser condenado a una pena de prisión de hasta 10 años y una multa máxima de un millón de euros (1. 2 millones de dólares). Por otra pesquisa, conversaciones telefónicas de Sarkzoy fueron espiadas y revelaron la existencia de un pacto de corrupción con el juez Azibert. En total, hay una decena de casos abiertos contra el exmandatario francés.