Las personas afectadas por el incendio en un campamento irregular en Lindavista, conocido como Colector 13, ocurrido el pasado 2 de mayo, decidieron no dejar su terreno, y ante la zozobra de lo que viene para ellos, pidieron a las autoridades a que aceleren los trabajos de reconstrucción de sus viviendas, pues, se tenía previsto que los trabajos comenzaran desde el lunes.
Durante un recorrido, se observó que la zona fue limpiada, y que las familias afectadas continúan con sus actividades.
Aquellas viviendas que no se vieron afectadas, continúan habitadas, mientras que las 150 familias de las 33 casas que se consumieron por las llamas, se refugian en una capilla, habilitada como albergue.
Aun no tienen luz, según contaron, ni en las casas de lámina que no se vieron afectadas; los cables se ven achicharrados, pelados.
Las autoridades habilitaron conectores en postes de luz en las inmediaciones para que recagararan pilas, teléfonos, mientras algunos usan lamparas de sol colocadas sobre en techos para recargarlas.
La señora María de la Luz consideró que las autoridades ya se tardaron en atenderlos, pues primero había muchas personas ayudándolos y ahora, no saben cuál es el proceso que sigue.
“Nos prometieron muchas cosas, no tenemos luz, el lunes iban a venir a ver lo de la luz, nos iban a traer una estufita para hacer algo, hasta la fecha no se ha empezado. Fue esto cuando estaba calientito todo, prometieron muchas cosas y todo. Hasta la fecha ahorita ya no se han parado ni han dicho nada, ni hemos sabido nada si nos van a apoyar o no”, dijo.
En el puesto de mando, el director general de Desarrollo Social de la alcaldía Gustavo A. Madero, Joaquín Arturo Ávila del Castillo informó a este diario que será la alcaldía quien construirá las viviendas de manera provisional en lo que se trabaja en un proyecto formal para que habiten los afectados.