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Mujeres encapuchadas treparon por las rejas del Palacio de Cobián para ingresar a la Secretaría de Gobernación (Segob) en protesta por el caso de Holy Yash quien en 2019 fue presuntamente víctima de agresiones sexuales por parte de elementos de seguridad de la Fiscalía General de la República (FGR) y un militar.
A las 10 de la noche, un grupo de personas, que se identificaron como feministas, que portaban pasamontañas y ropa negra, lograron ingresar a las inmediaciones del recinto donde lanzaron pintura roja a los guardias de seguridad para exigir justicia para la menor de edad quien, después de levantar una denuncia por los hechos, fue amenazada de muerte.
En el video se puede ver como la madre de la victima, otra acompañante y una persona se subió arriba de la puerta tratando de evitar que se cierre, rodeadas de personal femenino del Ejército y Guardia Nacional que intentaban sacarlas.
"Ayúdenos, porque Guardia Nacional nos está golpeando, porque queremos justicia", dijo.
"A mí ya me quemaron mi casa, me amenazaron de muerte, las mujeres estamos solas", mencionó.
De acuerdo con declaraciones de las manifestantes para EL UNIVERSAL, “no van a callar, ni detener la lucha” pues, a seis años del ilícito, el caso completo está encarpetado aunque la mamá de Holy Yash también presentó una denuncia por agresiones, por la tortura y asesinato de sus mascotas y la desaparición de otros dos animales de compañía.
De igual forma, dijo que, "Nosotras solamente venimos a pedir ayuda, que se entreguen a los militares que violaron a mi hija".
El personal logró detener a las mujeres encapuchadas que intentaron entrar a la Secretaría de Gobernación, rodeando a las dos personas con la madre de la criatura.
"Ustedes nos arriesgan, solo estoy pidiendo justicia".
Una de las manifestantes se desmayó por lo que se bajaron y se salieron de la secretaría.
Por el delito, ocurrido en Chimalhuacán, Estado de México, la agrupación se manifiesta desde 2019 afuera de la fiscalía capitalina, la Segob e incluso Palacio Nacional en búsqueda de esclarecimiento, pero, pese a las pintas y demandas, el caso sigue detenido, según acusaron.
Con información de Juan Boites.
