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Para utilizar sal, un condimento muy popular en la cocina, no solo se debe considerar la cantidad que necesitan los alimentos, sino también el mejor momento para agregarla.
Y es que de esto depende que su textura quede como lo esperas y, desde luego, que su sabor no se arruine. Menú te comparte el secreto para lograrlo.
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¿Cuáles son las ventajas de utilizar sal en la cocina?
El sodio, comúnmente conocido como sal, es un condimento que se utiliza para diversas funciones: curar carne, hornear, espesar, conservar la humedad, realzar el sabor de otros ingredientes y preservar los alimentos, indica la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA),
Agregarla a las comidas es un hábito tan común que a veces, sin darnos cuenta, rebasamos la cantidad de consumo. Hay que recordar que un exceso puede ocasionar enfermedades como la hipertensión.
Un método para moderar la ingesta consiste en supervisar el momento en que se agrega a los platillos, esto para evitar que el sabor de los alimentos "desaparezca" después de la cocción.
Tal como lo explica el tecnólogo en alimentos Lorenzo Mingallón, la sal pasa por un proceso de ósmosis que interfiere en su capacidad de salar. Además, cuenta con una propiedad higroscópica, lo que significa que puede absorber agua de su entorno y por eso seca algunos comestibles.
En ese sentido, se sugiere agregar la sal antes de la cocción para lograr un sabor y resultado diferente. A continuación, te mostramos un par de ejemplos:
Pasta (agregar la sal antes)
Hierve la pasta en agua con sal para evitar un sabor desagradable.
Salar el agua permite que el condimento penetre en la pasta, dándole un buen sabor desde el interior. Se recomienda agregarla justo cuando empiece a burbujear el agua para evitar retrasar el proceso de ebullición.
Otros ingredientes y alimentos que se recomienda salar antes son:
- Masa para hornear.
- Arroz.
- Frijoles.
Carne (agregar la sal antes o después)
El momento para agregar sal a la carne dependerá del tipo, corte y método de preparación:
- Método de salmuera en seco: añádela antes.
- Método "a la barbacoa": también añádela antes de llevar la carne a las brasas para facilitar su ahumado.
Por otra parte, las carnes que se sugiere salar después son:
- Método a la plancha, para no deshidratar el corte.
- Método de horneado, para cortes que vienen del lomo de la res o el cerdo.
¿Cuándo agregar sal a los alimentos fritos?
En el caso de los alimentos fritos, sofritos y salteados, es importante tener cuidado con la sal.
En preparaciones como las papas fritas, lo mejor es añadir el condimento después de freír. Durante el proceso, la parte exterior de las papas se vuelve crujiente, mientras que el interior permanece tierno.
Si agregas la sal antes de freírlas, corres el riesgo de perder esa textura crujiente, ya que la sal podría hacer que las papas se ablanden, explica el blog de la marca de freidoras MetalBoss.
Además, es preferible hervir las papas con sal antes de freírlas para conservar su sabor y mejorar su textura. A su vez, se evita la formación de azúcares que podrían provocar un pardeamiento prematuro.
Para los nuggets, dedos de queso, boneless, etcétera, la masa con la que se capean ya lleva sal, así que no es necesario agregarles después de haberlas cocinado.
Si sientes que le faltan sabor, compensa con un aderezo o salsa para no consumir demasiado sodio.
Seguir estas recomendaciones no solo mejora el resultado de tus platillos, sino que permite moderar la ingesta y evitar problemas de salud.
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