Más Información

Harfuch revela detención de 14 personas vinculadas a huachicol fiscal; defiende a extitular de Marina

Entre protestas contra Adán Augusto, Andrea Chávez rinde informe de actividades en Chihuahua; “no a La Barredora”, reclaman

De cachorro a héroe: Arkadas, el perro donado por Turquía, sorprende por lo rápido que creció; video se viraliza

Vinculan a proceso a militar por abuso sexuales contra menor en Quintana Roo; lo acusan de privación de la libertad y lesiones
Todos los deportes tienen sus diversos problemas, pero se transparentan más en el ambiente profesional, ya que es el que tiene gran exposición en los medios.
Problemas como las sustancias prohibidas que ingieren los atletas, las apuestas ilegales, los partidos arreglados, las contrataciones “recomendadas” y “arregladas” entre promotores de los deportistas, las clínicas que analizan el doping que protegen a las estrellas para no mermar el espectáculo, así como un sinnúmero de circunstancias que existen en las Ligas profesionales, en las que existen contrataciones millonarias con grandes cantidades en premios, están creando una espiral peligrosa que afecta el desarrollo del deporte.
En el tenis, por citar un deporte, las pruebas antidoping son cada vez más escasas e inadecuadas y, aunque suben los premios escandalosamente en los cuatro Grand Slams, los programas antidoping no reciben fondos para actualizar métodos y no cuentan con recursos para poder hacer estos exámenes de manera correcta y honesta.
El caso más sonado en el tenis ha sido el de la rusa Maria Sharapova, quien fue perseguida por tener una pésima relación con los directivos de la WTA y sus compañeras. La gente se pregunta por qué no llegan las pruebas a la élite de jugadores en ambas ramas y la respuesta es muy sencilla: los torneos quieren tener a los grandes nombres en su elenco, porque —a final de cuentas— los patrocinios y las marcas son los que pagan los premios de los competidores.
El apoyo a las pruebas de antidopaje debe venir de las mismas Ligas, de los equipos, de las instituciones, fondeando de manera positiva estas situaciones para ir logrando objetivos claros que demuestren que debe existir transparencia en todos los órdenes del deporte.
Todas las disciplinas tienen estos problemas de dopaje, de arreglos o amaños de partidos por el tema de apuestas, de contrataciones “bomba” en muchos equipos, de empresarios que cuidan su negocio y no atacan el problema de frente, pero desafortunadamente esta situación está llevando a problemas muy serios en el futuro del deporte.
luis@vamosdeportes.com