Más Información
Oaxaca de Juárez.— La empresa Eco Enlace, propietaria del autobús turístico que volcó la madrugada de ayer en límites de Oaxaca y Puebla, deberá hacerse responsable de indemnizar a las familias de las 16 personas que murieron en el accidente, así como de la reparación del daño a los 29 heridos, aseguró el gobierno de Oaxaca, pese a que la unidad salió del Centro de Movilidad Migratoria instalado y supervisado por autoridades federales y estatales.
Consultado por EL UNIVERSAL, el secretario estatal de Gobierno, Jesús Romero López, precisó que la empresa turística cumple con los requisitos que la ley establece y pasó por una revisión por parte de las autoridades que operan el centro de movilidad, para brindar servicio.
También cuenta con el respaldo de una aseguradora para hacerse cargo de los gastos, y agregó que sería una “condición humana” la que podría haber causado el accidente.
Aunque inicialmente se dijo que el chofer se dio a la fuga, el funcionario confirmó que ya se presentó, junto con el dueño de la unidad, para atender la emergencia.
“Entendemos que fue una condición humana la que afectó la conducción del vehículo. Tengo conocimiento que el chofer ya se ha presentado, junto con el dueño del vehículo y la aseguradora, para dar seguimiento a todos los requerimientos que tendrán estas familias”, detalló el funcionario.
De acuerdo con información del Instituto Nacional de Migración (INM), el camión turístico con la leyenda Turismo Xoxo tenía placa de circulación 938RP5, es propiedad de la empresa Eco Enlace y en la unidad viajaban 55 personas, todas migrantes en tránsito.
“Este accidente se suma a algunos más que se han registrado tanto en el territorio oaxaqueño como en Puebla, y que enlutan a familias sudamericanas y centroamericanas. Nuestras condolencias como gobierno a nuestros hermanos venezolanos”, reconoció el funcionario.
Confusión en cifras
El accidente se registró la madrugada de este viernes en la carretera 135-D Oaxaca-Cuacnolapan. La volcadura tuvo lugar hacia las 4:30 de la madrugada en el kilómetro 88, en la jurisdicción del municipio de Tepelmeme de Morelos, sobre la supercarretera que comunica a Oaxaca con la Ciudad de México.
Aunque inicialmente el gobierno de Oaxaca, la Guardia Nacional, la fiscalía estatal y el INM dieron como saldo oficial el de 18 personas fallecidas en el accidente, poco después la fiscalía oaxaqueña rectificó y fijó en 16 el número de víctimas mortales.
Todas las personas fallecidas eran migrantes originarios de Venezuela y Haití. Salieron de Oaxaca con rumbo a la Ciudad de México.
La unidad partió del Centro de Movilidad Migratoria instalado por los gobiernos federal y estatal en San Sebastián Tutla, municipio conurbado a la capital, de acuerdo con reportes de elementos de la Agencia de Investigaciones (AEI).
Dicho espacio fue habilitado en un terreno por autoridades de ambos niveles, junto con uno más en Juchitán, como una solución a la oleada de extranjeros en tránsito que pernoctaban en la vía pública y en terminales de autobuses desde hace varios meses.
Sólo en su primera semana de operaciones —que iniciaron el 25 de septiembre—, ambos centros de movilidad reportaron más de 23 mil traslados a la Ciudad de México de extranjeros provenientes de Venezuela, Nicaragua, Cuba y Haití, quienes deben contar con un permiso temporal para poder abordar los autobuses, documento que les permite transitar sólo por algunos días por territorio mexicano.
Por esa razón, el Instituto Nacional de Migración informó que a las personas extranjeras lesionadas, que fueron trasladadas a hospitales de Tehuacán, Puebla, se les proporcionará una Tarjeta de Visitante por Razones Humanitarias, para continuar con la atención médica; además, la dependencia dijo que dará seguimiento a la evolución de los migrantes hospitalizados y notificó que “proporcionará el apoyo para el proceso de repatriación de los cuerpos... y se asistirá a los familiares de las víctimas en los servicios funerarios” .