Verdadero susto fue el que se llevó el productor Reynaldo López durante las grabaciones de la segunda temporada de “Más vale sola”, debido a que la actriz María Elena Saldaña sufrió una aparatosa caída al tropezar con una alfombra.

El productor comentó que no se dio cuenta de la gravedad del asunto hasta que la actriz le dijo que se sentía muy mal y que le dolía bastante la cabeza, pero lo que lo llevó al pánico fue darse cuenta que en dicha alfombra había quedado marcados los labios de “La Güereja”; incluso, pensó que no terminarían a tiempo las grabaciones, pero para su sorpresa la actriz se presentó a trabajar tres días después como si nada hubiera pasado.

Lee también

Christian Ramos confiesa que sufrió bullying y era el feo de la clase

Sincera y emotiva resultó la confesión del actor Christian Ramos, quien reveló que durante parte de su niñez y adolescencia fue víctima de acoso escolar.

“Hay personas que en la adolescencia nos creíamos más feos que pegarle a Dios. No nos atrevíamos a opinar en un salón de clases lleno porque éramos los pueblerinos, y no los cool”.

Sin embargo, el tapatío también dejó entre ver, que a pesar de esta mala experiencia, invirtió tiempo y esfuerzo en su crecimiento personal, especialmente en su seguridad.

“Pero aquí andamos, los que aprendimos a querernos tarde, pero estamos sorprendiéndonos y haciendo que nuestras vidas se pongan mejores”.

El actor habló sobre el bullying que sufrió en su infancia. Foto: Instagram.
El actor habló sobre el bullying que sufrió en su infancia. Foto: Instagram.

Lee también

David Garrett se pasea entre vendedores ambulantes

El músico alemán aprovechó su estancia en el Auditorio Nacional, donde este domingo ofreció un concierto, para recorrer los puestos de merch que ofrecían sobre él los vendedores ambulantes antes de su presentación. Así, lo mismo pudo ver la originalidad algunos productos como de diseños con su imagen en playeras, tazas, gorras, sudaderas, plumas, llaveros y hasta música en USBs, lo que le sorprendió y tomó con humor.

El violinista no pasó desapercibido y, en unos instantes, decenas de personas, la mayoría que estaban a punto de entrar al recinto, se arremolinaron a su alrededor para tomarle fotos y pedirle autógrafos, antes de regresar a su camerino para alistar su actuación.

[Publicidad]