
Martha Higareda anunció con ilusión que está embarazada y, en lugar de bendiciones, la recibió el folclor de internet. Su historial de anécdotas inverosímiles (“bebés que hablan inglés”, “charlas con el Canelo”, “historias con Yordi”) le jugó en contra: la noticia se convirtió en material de comedia colectiva.
Las redes anticipan a un bebé prodigio, digno de una biografía: que si nacerá tocando batería, que si caminará a los siete meses, que si se llamará Ulises o Renata según dicte “Amarte duele”. Y aunque Martha celebra su nueva etapa, Twitter y TikTok la coronan (otra vez) como “La reina de las inventadas”. Al final, todo es parte de las bromas de las que ella sonríe; el público también.
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En la selva de “Survivor México” hay estrategias, hay corazón… y hay cizaña con nombre y apellido: John Guts. Desde la temporada pasada carga con la etiqueta de polémico, pero este año decidió superarse: provocaciones constantes, burlas, comentarios que rozan el machismo y un estilo de confrontación que los espectadores comparan con Adrián Marcelo en “La casa de los famosos”.
El público no se guarda nada: ya acusa a Warrior y a la producción de solaparlo porque “el villano rentable también da rating”. En X y YouTube abundan hilos preguntando si esa es la imagen que Azteca quiere promover. Mientras tanto, Guts sigue en pantalla, multiplicando cámaras y dislikes. Al parecer, en la televisión de los extremos, la redención vende menos que el conflicto… y los buscadores de rating lo saben de memoria.
Ni el paso del tiempo ni el algoritmo pueden con las leyendas. “Más sabe el diablo por viejo”, cinta que reunió por última vez a tres figuras históricas del cine mexicano, Ignacio López Tarso, Isela Vega y Lorena Velázquez, se coló al top 5 de Netflix en su primer fin de semana, rebasando incluso el lugar siete que logró en su estreno en cines allá por 2018.
La historia es sencilla: un joven entra a un asilo para conquistar a una trabajadora del lugar… pero se topa con tres monstruos sagrados que terminan robándose la película. López Tarso, eterno Macario; Vega, ícono de la transgresión en La viuda negra; y Velázquez, la vampira favorita de El Santo, confirman que hay clásicos que nunca pasan de moda. Y si alguien pensaba que el streaming era solo para “Bridgerton” y superestrellas, estas leyendas vinieron a decir: “¡Quítate, que ahí te voy!”.
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