
Rompiendo con lo que significa un estreno comercial en cines tradicionales, a la vez de ser congruente con lo que muestra en su historia y generar comunidad entre los espectadores, la película "Lumbrensueño" será estrenada en cineclubs, un universo olvidado habitualmente por las distribuidoras.
Los cineclubes, junto con las salas independientes, son considerados como Espacios Alternativos de Exhibición de acuerdo con el Anuario Estadístico de Cine Mexicano 2024, que contabiliza más de 850 puntos diseminados en la República Mexicana. Esta cifra representa en proporción el 10% de las salas pertenecientes a cadenas medianas y grandes como Cinépolis y Cinemex.
Lee también: Error del integrante del Grupo Firme, y agradecimiento de "La Chilindrina", entre lo más leído
Lumbresueño, dirigida por José Pablo Escamilla, sigue a un joven empleado explotado quien tras el alejamiento inexplicable de su amigo, encuentra consuelo por medio de la fotografía.
Llega con el antecedente de haber participado en los festivales de Venecia y Morelia en 2023, así como el de Málaga 2024, donde su protagonista Diego Solís se alzó con el galardón a Mejor Actor.
“Estrenar en cinetecas y cineclubes es congruente con la energía de la película, donde el personaje se refugia en un centro cultural autosugestivo y este es un tema importante, porque es ahí donde se genera cultura y da cobijo a comunidades creativas”, comenta Escamilla.
“Está claro que eso de ir al cine (tradicional) es romántico, pero también es una realidad que el cine de centro comercial está muriendo porque es muy caro, veces la gente no tiene dinero para entrar y, cuando lo hacen, ven quizá una película horrenda y gastan mil pesos; en los cineclubes igual no te gusta una película, pero al final te vas a enfrentar a dialogarla en comunidad”.
Lumbrensueño se exhibirá inicialmente en la Casa de Cine y la Cineteca Nacional de Xoco en la CDMX; la Cineteca FICG en Guadalajara, el Centro Audiovisual Toluca, y Film Club Café en el EdoMex y en el Interestela Cinema de Puebla.
La cinta surgió a partir de una experiencia del propio director, quien en su adolescencia sufrió por el suicidio de un amigo.
“Fue un duelo abstracto, nadie quería hablar de eso conmigo y me acuerdo que en ese momento mi refugio fue una cámara digital que me había regalado mi abuela y comencé a tomar fotos. Fue la primera vez que pude redimensionar al mundo y, aunque no iba a escribir (el guion) de eso, todo el proceso me fue empujando desde una perspectiva caótica y media poética”, explica.
Lee también: Películas sobre videojuegos: luz con "Resident Evil", sombra con "Gran turismo"
La cinta, filmada integrante en Toluca, toca temas como el trabajo juvenil, la explotación y la relación tóxica laboral.
“Y habla mucho de la masculinidad, de cómo hablamos ese tema (de dolor) con la evasión, con no hablar”, apunta Escamilla.
Eligió trabajar con actores naturales, apoyados por el experimentado Francisco Barreiro (Somos lo que hay), intérprete del jefe del negocio de hamburguesas.
“Me parece interesante para adentrarme en sus cabezas porque son personas normales que están también descubriendo cosas”.