Pasaron 10 años para que una primera película mexicana, volviera a deslumbrar en Berlín.
Esta tarde la cinta dirigida por el mexicano Ernesto Martínez Bucio, “El Diablo fuma (y guarda las cabezas de los cerillos quemados en la misma caja)”, se llevó a casa el galardón a Ópera Prima del certamen alemán, siendo la única representante 100% nacional que lo hizo.
El filme sigue a cinco niños que se quedan a solas con su abuela y empiezan a involucrarse en eventos desafortunados con los vecinos, mientras absorben los miedos de ella.
“Es historia que sale de nuestro corazón”, dijo Martínez Bucio al momento de recoger el premio.
Previamente el jurado, al momento de dar a conocer el título ganador, indicó que se trataba de una película era un recuerdo sobre la responsabilidad sagrada de proteger la belleza y la inocencia de los niños.
“Hemos visto la aniquiliación de miles de niños como meros daños colaterales por fuerzas políticas”, se indicó.
La más reciente película mexicana en obtener el galardón fue “600 millas”, de Gabriel Ripstein, en 2015.
“El Diablo fuma (y guarda las cabezas de los cerillos quemados en la misma caja)” formó parte de la sección Perspectivas, la cual está dedicada exclusivamente para primeras películas. En esta ocasión compitieron catorce títulos, procedentes de países como Italia, India, EU, Austria, Egipto y Francia.

Es el debut en cine de los niños y algunos ya adolescentes, Mariapau Bravo Aviña, Rafael Nieto Martínez, Regina Alejandra, Donovan Said, Laura Uribe Rojas.
“Estuvo cardiaco, ya nos habíamos ido todos y ayer nos avisaron que por favor regresáramos, pero sólo pudo Neto que todavía estaba en Europa”, detalla Gabriela Gavica, productora del largometraje.
En la ceremonia también se premió con el Oso de Plata del Jurado a la cinta brasileña, con coproducción mexicana, “O ultimo azul”. El realizador Gabriel Mascaro es carioca, pero contó con un equipo técnico integrados por mexicanos como el fotógrafo Guillermo Garza y el editor Omar Guzmán.
“Dreams”, de Michel Franco, competía por el Oso de Oro, máximo reconocimiento del festival, que finalmente quedó en manos de la noruega “Drommer”, de Dag Johan Haugerud.
rad