Dos Luceros que no dejan de brillar con luz propia

De Chispita a La novia de América. Protagonizó películas con Pedro Fernández (Coqueta) y Luis Miguel (Fiebre de amor), cantó “Veleta”, “Llorar” e interpretó tres personajes distintos en la telenovela Lazos de amor. El talento de Lucero ha sido parte del álbum familiar de varias generaciones.

Hoy se siente satisfecha con una carrera que este 2025 cumple 45 años —debutó en televisión a los 10 años, en 1980, en el programa infantil Alegrías de mediodía—, aunque reconoce que el paso del tiempo es inevitable y que las nuevas generaciones quizás no dimensionen su trayectoria.

“Me encanta tener ese título de La novia de América, aunque, claro, todo evoluciona, el tiempo pasa, hay generaciones nuevas, gente que tal vez no conoce toda mi carrera, por eso me gusta hablar de mi trayectoria, de mis años en esto”, dice a EL UNIVERSAL.

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“Soy feliz conservando una imagen que me ha costado mucho, que me enorgullece, y me gusta muchísimo seguir trabajando en ella”, se sincera.

Y son justo esos jóvenes los que podrían sentirse más identificados ahora con su hija Lucero Mijares, de 20 años, quien se ha ganado el cariño del público al participar junto a su papá, Manuel Mijares, en el reality Juego de voces.

El concurso de TelevisaUnivisión, cuya primera temporada se transmitió en abril de 2024 por Las Estrellas, enfrentó a cantantes consagrados —como Mijares, Ricardo Montaner, Erik Rubín o Eduardo Capetillo— con sus hijos, en un formato de duelos musicales, retos escénicos y momentos de convivencia familiar.

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Ahora, el escenario las reúne en la nueva temporada del show, que llega mañana por Las Estrellas. Ambas comparten por primera vez un proyecto de tv desde un lugar distinto: Lucero como parte del equipo Las leyendas (consagrados), y su hija de Las estrellas (los jóvenes), que ya no serán necesariamente padres con hijos.

Más allá del nuevo formato, esta coincidencia tiene para ambas un valor especial. Para la protagonista de El gallo de oro, es la oportunidad de acompañar de cerca el crecimiento de su hija y transmitirle lo que considera esencial: disciplina, templanza y constancia.

“Estar juntas, compartir de una manera increíble, es un privilegio que la vida me da. Poder verla de cerquita, cómo canta, cómo va encontrando su estilo... a mí me emociona muchísimo”, dice Lucero.

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El peso es otro para Lucero Mijares, quien reconoce con gratitud el legado de su familia, aunque también busca trazar su propia ruta.

El camino de Lucero Mijares

La joven ha sabido construir su espacio. Con su protagónico en el musical El Mago (The Wiz) , su desempeño vocal y presencia escénica sorprendieron a la crítica. También ha formado parte de los shows de su padre y ha conectado con la audiencia gracias a su espontaneidad en redes sociales.

“Los admiro muchísimo a los dos. Me gusta mucho que tenga la voz de los dos y que tenga parecido a los dos, porque al final son mis papás y son las personas que más quiero en la vida”, explica.

Lucero, como madre y como artista, reconoce en su hija e insiste en que lo que realmente sostiene una carrera no es el brillo inicial, sino el trabajo humilde, la preparación constante y la disciplina.

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“El talento es importantísimo en la vida, se los digo a mis dos hijos, pero la constancia, el trabajo constante, la tenacidad, la disciplina… eso hace también éxitos increíbles, eso los lleva a la cima”

Desde su mirada, asegura, el verdadero secreto no está en la excepcionalidad, sino en la perseverancia: “A ella le veo un talento sorprendente, pero siempre le insisto que siga adelante con su preparación y con todo eso que la va a llevar a la cima. Porque esto es de trabajo diario, aunque tengas miedo y dudas. Eso marca la diferencia”

En su forma de hablar se nota que la joven ha hecho propios algunos de esos aprendizajes, aunque también conserva una frescura que no busca complacer: no aparenta tenerlo todo resuelto, ni se instala en una posición de hija prodigio. Habla con calma, sin adornos, y reconoce con sencillez las exigencias que enfrenta.

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“Puedo aportar lo que a mí me gusta, que son las baladas poderosas, el pop… y pues nada. Eso me representa, eso es lo que soy”.