Tultepec, Méx.— La producción de castillos pirotécnicos es toda una tradición para el señor Gustavo Hernández Cortés, pues desde los 10 años comenzó a meter las manos en la pólvora ayudando a sus abuelos y padres, para contribuir al sustento familiar; para él, “si no hay pólvora no hay fiesta, es como si no le pones salsa a un taco, pues termina por no ser taco”.
Con 48 años de experiencia en el ramo de la pirotecnia, Gustavo se ha especializado en la elaboración de castillos, un elemento esencial para las fiestas patrias que están próximas a celebrarse en el país, tardando hasta un mes en preparar todo lo necesarios para los monumentales castillos que van de los dos hasta los 25 metros de alto.
“Todo esto es arte, porque no hay máquinas, todo es a mano. Para armar un castillo nos aventamos un mes de trabajo y hay de dimensiones, que va de dos a cinco cuerpos, desde dos hasta 25 metros y cada uno se acompaña con figuras como la Bandera de México, el águila, rehiletes, campanas y retratos de héroes nacionales como Miguel Hidalgo, Josefa Ortiz de Domínguez”, contó.
No sólo es el arte pirotécnico, sino también saber dibujar, pues con la ayuda de cinco personas más realizan los moldes de los héroes de la Independencia de México plasmando a escala los rostros de cada uno, según el pedido, para después trazarlos en grande y tenerlos listos para el día del Grito de Independencia.
Para la celebración patria de este año, tienen dos pedidos de castillos, ambos de 25 metros de altura y que viajarán a Puebla e Hidalgo para montarlos, este último proceso les lleva aproximadamente dos horas por cada uno, toda vez que el armado con base de madera o metal y vara blanca, se hace por cuerpos, desde dos hasta cinco, de acuerdo con las figuras y se arman los coloridos verde, blanco y rojo.
“Los mexicanos somos muy fiesteros y un taco sin salsa, pues no es taco y con todo esto que hacemos queremos demostrar que los artesanos de Tultepec trascienden a nivel mundial. La gente queda asombrada con los piromusicales y los castillos; nos tardamos un mes, un mes de trabajo se quema en media hora porque cada uno estará cargado con 15 kilos de pólvora con luces, mecha, vueltas y chisperos multicolores propios de la Bandera de México”, señaló.