Dentro del cuadrilátero no hubo ser humano que pudiera derrotar a Ricardo ‘Finito’ López, quien presume haberse retirado invicto como boxeador profesional. Hoy, a sus 58 años, el expugilista confesó que venció la batalla más importante de su vida, fuera del ring.
En su reciente aparición para ser inducido al Salón de la Fama del Boxeo en California, López llamó la atención de los asistentes al arribar al evento en silla de ruedas. En el discurso que ofreció, el exboxeador dio a conocer los pormenores de la gran batalla que libró.
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“Para mí es un sueño hecho realidad estar aquí”, mencionó el ‘Finito’. “Quiero compartir con ustedes que casi no llego a este evento, ya que estaba entrenando y sentí un dolor muy fuerte en la espalda y brazos. Es un cáncer en mis huesos que, gracias a Dios y a la base de disciplina, ya gané esta batalla”.
Fue en febrero cuando se le detectó al oriundo de Cuernavaca, Morelos mieloma múltiple que es un cáncer en las células plasmáticas, encargadas de producir los anticuerpos y que ayudan a combatir infecciones.