Arlington, Estados Unidos.— Nueve meses después, México y Estados Unidos se volverán a ver las caras. Esta vez, en la final de la Nations League 2024.
En junio del año anterior, la Selección Nacional fue humillada (3-0) por los anfitriones, en la semifinal de la Liga de Naciones. Mañana, la opción de revancha se presentará para el cuadro mexicano.
“En lo personal, sí [es una revancha]. En su momento, ofrecí disculpas y reaccioné de una manera que no debía, dejé al equipo como no debía. En lo personal, sí. Será un lindo encuentro y una final”, declaró el central César Montes, uno de los líderes en la defensa, quien en aquel duelo se fue expulsado.
Jaime Lozano aún no estaba en aquel equipo comandado por Diego Martín Cocca; sin embargo, sabe lo que se jugará este domingo frente al eterno rival de la zona, tanto en lo personal como en lo colectivo para el Tricolor.
“Es una final, un clásico. Estados Unidos ha ganado las únicas dos ediciones del torneo, pero no hay favoritos. Los dos equipos tienen la disposición de salir adelante. El nuestro está bien, emocionalmente estará fuerte”, aseguró Jimmy, DT del cuadro nacional.
Por su parte, Luis Chávez reconoció que el equipo ha cambiado en los últimos nueve meses y presumió una mejora desde la llegada de Lozano al banquillo de México.
“Sabemos a lo que jugamos. También, antes de los partidos nos hacen saber las debilidades de cada equipo, para saber por dónde atacar y en dónde son buenos, para contrarrestar eso. Esta Selección no tiene tope y aún nos queda mucho por mejorar”, concluyó.