Odian la escuela, pelean con sus compañeros, comen comida chatarra, desobedecen a la autoridad, todas son conductas de cualquier adolescente; sin embargo, los que habitan la Casa Club del son diferentes.

Regina Alegret, directora de este departamento en el Nido, asegura que “su vida es totalmente diferente a la de cualquier adolescente”. No sólo están en etapa de cambios, lejos de su familia y amigos, sino que también deben rendir en la escuela y en la cancha.

“Actualmente tenemos 66 que viven en Casa Club, ya son más adolescentes que niños, pero niños al fin. Son jugadores que llegan desde los 12 años y están en Casa Club hasta los 17”, explica en entrevista para EL UNIVERSAL Deportes.

Lee también

Aunque a su corta edad ya eligieron una carrera y es la del futbol, en el América los obligan a tomar clases, rendir en ambos ámbitos y formarlos para la vida, más allá de su desempeño en el rectángulo verde.

“Nuestra idea es darles una formación necesaria, para que al momento de salir del club ellos tengan las herramientas para, no sólo sobrevivir, sino para realmente tener la vida que se necesita. No solamente en el ámbito deportivo sino en el personal”, explica la líder azulcrema.

Salir de casa a los 12 años no es sencillo, vivir y compartir con más de 60 personas lo hace aún más complicado; sin embargo, el sueño es mayor y ese es su combustible. Apoyados por Renata y los tres coordinadores que están 24/7 con ellos, sortean los obstáculos a los que se enfrentan.

“Vivir con 65 personas más, que tienen tu mismo nivel hormonal, con culturas y tradiciones distintas al ser de diferentes partes de la República; algunos han vivido situaciones complicadas en su familia, otros no y les cuesta entenderse. Hay personas de todo tipo”, considera Alegret sobre lo más complicado que viven los habitantes de la Casa Club americanista.

Lee también



Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses

Comentarios