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La Sala Silvestre Revueltas , sede de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM), y que en noviembre pasado reabrió sus puertas tras una intervención de 10 meses y una inversión de 50 millones de pesos, con la fuerte lluvia que se registró ayer presentó goteras que obligaron a suspender el ensayo que realizaba la Orquesta Sinfónica de Minería , previo a su concierto de hoy en el Palacio de Bellas Artes.
Además, las goteras se extendieron al área de camerinos y a la salida del escenario; en un video captado ayer se observa un pasillo encharcado, plafones retirados y el sonido estridente de la lluvia.
El ensayo de la OSN se canceló no sólo por las goteras, también porque el sonido de la lluvia no les permitía escuchar.
En noviembre pasado la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México informó que la Sala, tras su intervención, lucía "un diseño contemporáneo", destaca por su brillantez acústica, "equiparable a la mejor sala del mundo: la Symphony Hall de Boston, ambas con un tiempo de reverberación sonora de 1.8 segundos".
Además, se cerraron algunas rejillas, se instaló un nuevo sistema de aire acondicionado, se sellaron las puertas del espacio, se colocaron puertas dobles de vidrio en la entrada para evitar ruidos del exterior.
La OSM se encontraba ensayando el concierto con el que concluirán las celebraciones por su 40 aniversario. Interpretarán en Bellas Artes a las 20 horas la Sinfonía núm. 8 en fa mayor, op. 93 y la Sinfonía núm. 9 en re menor, op. 125, Coral, con la colaboración del Coro VocalEssence de Minnesota y el Coro de la OSM, bajo la dirección de Philip Brunelle.
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