Más Información
A medida que crece el interés y la oferta de autos eléctricos es necesario aumentar la cantidad de estaciones de carga o electrolineras.
Existen hoy mil 400 estaciones de carga para este tipo de unidades en todo el país, cuyo parque vehicular es de aproximadamente 75 mil 700 coches eléctricos de batería o enchufables, de acuerdo con la firma Roland Berger.
Esto significa que hay 54 vehículos, en promedio, por cada cargador, pero lo recomendable a nivel internacional es tener la infraestructura para atender a 2.6 vehículos por electrolinera.
Lee también: Reinversión de utilidades lleva Inversión Extranjera a 31 mil millones de dólares, revela Secretaría de Economía
Por lo tanto, México debería tener 29 mil estaciones de carga este año y 291 mil en 2030. “Los cambios estructurales en el mercado van a hacer que cambie la circunstancia de aquí al 2030”, dijo Oscar Silva, socio para Norteamérica de Roland Berger.
Hace dos o tres años sólo había un par de opciones de vehículos eléctricos con un precio cercano al millón de pesos, por lo que no eran accesibles para el grueso del consumidor, pero hoy tenemos un portafolio más amplio de vehículos eléctricos con un precio de entrada de 390 mil pesos y está bajando cada semana. Esto ya se vuelve asequible para una buena parte de los consumidores”, explicó.
Parque vehicular se multiplicará
Para este año, la proyección de Roland Berger es la comercialización de 33 mil vehículos eléctricos de batería o eléctricos enchufables, pero esta cifra crecerá gradualmente hasta alcanzar 189 mil autos eléctricos en 2030 dando como resultado un parque vehicular de 757 mil 969 unidades en México.
Por lo tanto, la inversión estimada necesaria para establecer suficientes estaciones de carga sería de 10 mil 412 millones de dólares de 2024 a 2030.
De momento, han sido los propios fabricantes de vehículos eléctricos como Nissan, BMW o Tesla los que han establecido la infraestructura de recarga en el país, pero recientemente han entrado jugadores independientes que sólo se dedican a operar estaciones de carga como Greenspace o Evergo. Este último opera hoy ocho de cada 10 electrolineras.
En entrevista previa, Daniel Abraham López Páez, director comercial de Evergo en México, expuso que, desde 2018, la Comisión Reguladora de Energía aprobó las reglas para detonar la instalación de electrolineras en el país.
Lee también: Sur y sureste del país reciben sólo 7% de IED en este sexenio
Sin embargo, el gobierno no ha hecho inversiones para crear una infraestructura de carga publica porque no tiene recursos disponibles, han sido las empresas privadas o emprendedores quienes han invertido en ampliar la red de estaciones de carga.
Cada electrolinera tiene su propia subestación de media tensión o baja tensión para vender la electricidad y a los conductores de autos eléctricos se les cobra mediante una aplicación en su celular donde se indica el precio del kilowatt-hora (kWh) por zona, por lo que el costo de cargar un auto eléctrico varía por zona geográfica y la cantidad de energía a cargar, explicó López Páez.
Cargador con costo de 35 mil dólares
Roland Berger estimó que la inversión para una estación de carga ronda los 35 mil dólares por cargador, pero cada estación tiene varios cargadores rápidos y no.
“La colaboración entre gobierno y estos jugadores para hacer una política pública va a ser indispensable porque se está acelerando la venta de vehículos eléctricos” opinó Silva.
“La llegada del gobierno de Claudia Sheinbaum con personas en el gabinete como Marcelo Ebrard, el primero en establecer una política pública para el impulso de autos eléctricos, han expresado que quieren que regrese la iniciativa privada a la inversión en energías renovables y creemos que ellos podrían retomar esta política para la adopción de vehículos eléctricos y su infraestructura”, añadió.
El desarrollo de infraestructura de carga disponible en casa, lugares de trabajo, centros comerciales, corredores carreteros y espacios públicos, disminuye el sentimiento de ansiedad en el usuario por quedarse sin carga.
“Es normal que el primero que empieza a implementar una infraestructura de recarga son los fabricantes de automóviles eléctricos, pero después llegan otros jugadores como en Europa y Asia donde hay operadores puramente de recarga con distintos modelos de negocio. Ya estamos viendo interés de estos jugadores y de inversionistas mexicanos por establecer infraestructura de carga”, agregó Silva.