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La demanda de servicios de fundición para la industria automotriz no se ha visto afectada por la aplicación de aranceles por parte del gobierno de Estados Unidos para los autos fabricados en México, aunque sí se han elevado los precios por las tarifas aplicadas al acero y aluminio.
Guillermo Ibáñez, presidente del Clúster de la Fundición, con sede en Jalisco, dijo que entre 67% y 70% de los servicios de fundición están destinados a la industria automotriz, ya sea para vehículos híbridos o de combustión interna.
Mediante la fundición de acero, aluminio y una mezcla de zinc se fabrican piezas como la carrocería completa de un auto, chapas, conectores, entre otras autopartes.
De acuerdo con Ibáñez, la demanda de fundición ha estado en aumento, ya que la producción automotriz no disminuyó tanto como se esperaba al darse a conocer la política arancelaria del gobierno del país vecino.
Sin embargo, hay un “ajuste” de precios que varía dependiendo de la pieza y el fabricante, afirmó el emprsario en la entrevista
“La realidad es que la industria de la fundición sí trae un crecimiento en demanda y el único tema son los ajustes en los precios, tanto en la fundición como en el siguiente paso de la cadena, como de la proveeduría de materia prima, pero realmente no están pegando tanto los aranceles”, explicó Guillermo Ibáñez.
Desde el 4 de junio, Estados Unidos aplica un arancel de 50% a las importaciones de acero y aluminio provenientes de varios países, incluido México.
El empresario agregó que el arancel aplica a determinadas fracciones arancelarias, por lo que no afecta a todos los fabricantes de autopartes ni de materia prima.
Por otro lado, comentó que las negociaciones con la industria automotriz siempre son en decremento de precio, por lo que las empresas dedicadas a la fundición deben asegurar varios contratos para poder bajar el precio cada año.
“Nos tenemos que ir ajustando, digamos 2% o 3%, pero a la baja, como proveeduría, y esos son contratos que sí o sí se tienen que cumplir para poder tener pedidos. Esto tiene un mensaje para la industria que, año con año, deben de tener proyectos activos para ser más competitivos”, indicó.
De acuerdo con el Clúster de la Fundición, las mayores plantas de este segmento se ubican en Estado de México, Nuevo León y Coahuila, en su mayoría enfocadas a la industria automotriz, así como en Jalisco, donde existe una mezcla de mercados no solo para la industria automotriz.
Además de los fabricantes de autos y autopartes, los principales clientes de la fundición son construcción, agroindustrial, fabricación de ferrocarriles, industria médica y aeroespacial.
En opinión de Ibáñez, sí hay oportunidad para incrementar la fundición con la renegociación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y la regla de origen para el sector automotriz, ya que, en promedio, 20% de los componentes de un automóvil son piezas de fundición.
La industria mexicana de la fundición produce alrededor de 3 millones de toneladas anuales, se ubica en el lugar 11 a nivel mundial en producción y genera más de 65 mil empleos directos.
En octubre, el Clúster de la Fundición llevará a cabo el Global Foundry Show en Expo Guadalajara donde se reunirán especialistas y líderes empresariales de la fundición.