Los apagones nuevamente están amenazando a los usuarios del servicio eléctrico en el país, ahora debido a la mala calidad del gas natural, factor que se agrega a otros como la falta de inversiones en generación y transmisión de energía, dijeron especialistas.
Este lunes se generó una interrupción masiva en el suministro de electricidad, afectando a usuarios de Tabasco, Campeche, Quintana Roo y Yucatán, y de acuerdo con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), el hecho tuvo como causa que el gas natural con el que se generó la electricidad presentó problemas de mala calidad por exceso de humedad.
“Los apagones anteriores se debieron en su mayoría tanto por la insuficiente generación disponible, como por la falta de capacidad de transmisión y distribución. Es preocupante agregar una nueva variable más a la lista de posibles causas, como en esta ocasión, un suministro de gas natural con condiciones irregulares de calidad”, afirmó Carlos Flores, analista del sector energético.

Para el experto, el escenario más probable es que los apagones, que aumentaron en frecuencia y magnitud durante el sexenio anterior, mantengan esa tendencia.
“Difícilmente las nuevas leyes de energía generarán la certidumbre necesaria para que la inversión sea suficiente para cubrir el rezago de los últimos seis años”, añadió.
El mismo lunes, poco antes de la medianoche, la CFE detalló que se presentó mala calidad de gas natural ocasionada por alto índice de humedad en el gasoducto Mayakán, derivado de una falla en la central de cogeneración Nuevo Pemex, limitando la generación eléctrica con este combustible.
Además, el déficit entre la reserva de electricidad en la región y el consumo energético se traduce en que un ajuste en la generación o transmisión tiene un efecto dominó que se refleja en problemas en el suministro directo a usuarios en la península, especialmente a zonas como Cancún, Riviera Maya y Mérida.
Ramsés Pech, analista del sector energético por Caraiva y Asociados, explicó que la mala calidad del gas se suma a que la región tiene una demanda que no es cubierta por la infraestructura de generación local, por lo que depende de otras regiones para recibir el fluido eléctrico a través del Centro Nacional de Control de Energía (Cenace).
“Pero esto evidencia que, específicamente en la península de Yucatán, el Cenace tiene que generar apagones para evitar un daño mayor al sistema, el cual está saturado, es decir, con una alta demanda que ocupa completamente la capacidad de generación y transmisión. Si quitas una planta de CFE, se viene abajo el sistema”, señaló Víctor Ramírez, socio de la consultora P21Energía.
“Por eso mismo se deben acelerar los proyectos de infraestructura, aunque sea de ciclo combinado, pero cuando estos estén funcionando ya la demanda habrá crecido, para volver a generar un problema”.
Agregó que también se deben retomar los sistemas eólicos y fotovoltaicos del sector privado disponibles en la región, mismos que no se conectaron en concordancia con la política energética que busca fortalecer a la CFE, dijo Ramírez.
Problema recurrente
El problema registrado el lunes no significó la primera ocasión en que se reportaron diversos apagones en el territorio nacional. En 2023 y 2024, durante la época de altas temperaturas, entre mayo y julio, el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) se vio en problemas por el incremento en la demanda de energía.
Esa situación se combinó con la falta de inversiones en el área de transmisión y distribución, lo que derivó en que se orquesten cortes programados rotativos del servicio en diversos estados del país.
Casiopea Ramírez, socia gerente en Fresh Energy Consulting, mencionó que ahora que se está materializando la reforma energética y que la CFE se agrupará en una sola empresa, se deben respetar los presupuestos para cada área, es decir, transmisión, distribución y generación, así como desarrollar planes de inversión geográficos y de largo plazo.
Sin embargo, la situación financiera de la CFE presenta retos importantes para el actual gobierno.
Hace un mes, la empresa eléctrica informó que registró pérdidas por 124 mil 444 millones de pesos durante el año pasado.
De acuerdo con el reporte financiero enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), ese resultado del año pasado contrastó con la ganancia reportada en 2023, cuando se logró una utilidad neta por 96 mil 191 millones de pesos.
Entre los factores que influyeron en los resultados destacó la dependencia de la empresa sobre el gas natural para generar energía, así como por ineficiencias en el área de generación.
A principios de febrero, la CFE anunció que, con el objetivo de descongestionar la Red Nacional de Transmisión (RNT), el gobierno federal invertirá 46 mil 611 millones de pesos en 65 proyectos para ampliarla y modernizarla.
Estos se suman a 80 proyectos más que el gobierno actual está retomando de la administración anterior, los cuales requieren una inversión de 65 mil 522 millones de pesos.