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juan.barrera@eluniversal.com.mx
El teléfono celular de Rosa Analí sonó muchas veces después de las 07:00 horas del pasado 26 de julio.
Sus compañeros la esperaban. La estudiante de excelencia de la carrera de Médico Cirujano de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala, de la UNAM, en Tlalnepantla, debía llegar al servicio de Cirugía del Hospital Vicente Villada, en Cuautitlán, pero no se presentó.
La joven de 23 años fue asesinada a las 06:30 horas con un arma de fuego al salir de su domicilio en la colonia San Mateo Cuautepec, en Tultitlán. Se dirigía al hospital.
Rosa Analí Aparicio Vega era una buena estudiante que realizaba su interinato para terminar la carrera de Médico Cirujano; haber llegado a ese punto, que es el último de la licenciatura en el cual los jóvenes están en la etapa de realizar el interinato, “no es nada fácil”, por eso la comunidad está indignada con lo ocurrido, dijo la directora de la FES Iztacala, Patricia Dávila Aranda.
La académica expuso que la sensación que se percibe al interior de la facultad es de indignación ante los hechos ocurridos.
La directora relató que desde el miércoles pasado acompañó al padre y hermano de la joven Aparicio Vega, quienes se encontraban devastados por la situación; la madre de Rosa Analí estaba en Veracruz y venía de regreso al Estado de México, después de enterarse del asesinato de su hija.
“La asaltan saliendo de su casa para tomar el autobús. Desgraciadamente estas historias las vemos todos los días y se echa por tierra una vida productiva, con futuro y, además, para acabarla de amolar, de una mujer”, contó.
La facultad demandó el reforzamiento de la seguridad tanto en las calles como en el transporte público, “mediante el cual los universitarios acuden cotidianamente a sus labores académicas”.