A la canción "Caray" Juan Gabriel le agregó un alegre estribillo: "Qué bueno, qué bueno, lero, lero, eso le pasa por andar..."
Ahora eso le cae como anillo al dedo a Nicolás Alvarado, quien acaba de renunciar a la dirección de TVUNAM con la aceptación del rector, Enrique Graue.
No dieron razones, pero son por todas conocidas: escribir en una columna periodística que no le gustaba la música y la personalidad de Juan Gabriel por "naco", "elemental" e "iletrado".
Esas ofensas causaron una ola de indignación que terminó en tsunami. Quienes defendieron al ex funcionario alegaron su derecho a decir lo que piensa, pero el espíritu anticlasista de la UNAM habló por la raza y demostró que ningún funcionario universitario tiene derecho a discriminar.
sc