Fragmentos de cohetes y satélites pueden caer a la Tierra o colisionar con otros objetos, mientras que los restos que se queman pueden dañar la capa de ozono. El impacto de la basura espacial crece sin control.

Los científicos han creado el primer mapa de mitocondrias en todo el cerebro, uno de los logros científicos más importantes de los últimos tiempos, pues podria desentrañar los trastornos cerebrales relacionados con la edad.