La semana pasada estuvo llena de retos y adversidades para el país, había consenso entre los analistas sobre la visita del Secretario de Estado del gobierno estadounidense, sobre todo por la cercanía e influencia de Marco Rubio ante el Presidente Trump.
Incluso en la prensa norteamericana existen observadores de la política que lo sitúan como candidato republicano a la Presidencia.
La visita de Rubio resultó tersa y la Presidenta Sheinbaum recibió elogios sobre los avances alcanzados en materia de seguridad y combate al crimen organizado.
En las próximas semanas habrán de instalarse comisiones binacionales que puntúan compromisos y evalúen las operaciones conjuntas emanadas de la cooperación y entendimientos entre ambas naciones.
Se plasma incluso el capítulo de esas operaciones binacionales -por ahora con exigencias estadounidenses durísimas- como prólogo de negociaciones hacia la actualización de raíz del vigente TMEC.
Si bien es cierto que la Dra. Sheinbaum y Trump no se han reunido personalmente, han conversado telefónicamente en 13 ocasiones, lo que significa que más allá de toda retórica y descalificación mediática, se ha construido un tiempo de calidad política, una relación de confianza y respeto.
La agenda de seguridad regional determina el éxito de otras como la comercial o diplomática.
Por eso resultan reconfortantes las palabras de Rubio al calificar como positiva la estrategia de seguridad emprendida por México.
Respecto al evento presidencial de rendición de cuentas sobresalen avances sustantivos en reducción de las pobrezas, lo cual significa que millones de familias viven hoy mejor que hace una década.
En el Informe de gobierno la Presidenta Sheinbaum enfatizó el aumento de la tasa de recaudación primaria obtenida por las agencias tributarias que mejoran los resultados del año anterior.
Así también alienta conocer el volumen de recursos recibidos vía inversión extranjera directa que en el primer semestre del 2025 rebasa los 35 mil millones de dólares, cifra que nos lleva a indagar por qué no aumenta con esa velocidad la inversión privada nacional.
La percepción generalizada de la gestión de la Presidenta sigue consistentemente elevada, de modo que los estudios de opinión sitúan su aprobación arriba del 70%.
Su formación académica impecable, su capacidad de administración gubernamental y su sensibilidad social imprimen ya un sello distintivo a su gestión presidencial.
Pedro Isnardo De la Cruz es Doctor en Ciencias Políticas y Sociales y profesor en la UNAM. Publicó en 2017 Decisiones estratégicas presidenciales en EUA: El aprovechamiento de la ocasión en crisis de Seguridad nacional y Terrorismo. George W. Bush y Barack Obama (2001-2012).
Juan Carlos Reyes Torres es Licenciado en Derecho por la Universidad Iberoamericana, con estudios en Ciencia Política y Administración Pública por la UNAM y profesor de Teoría del Estado.
Coautores de Para entender la 4T (2019), con el sello editorial de Stonehenge México.